Según los datos hechos públicos esta semana por la Federal Deposit Insurance Corp. (FDIC), las ganancias netas de las entidades retrocedieron, en total, hasta los 152.700 millones de dólares, un 1% menos; mientras que los gastos para hacer frente a cargos de la Justicia superaron los 6.500 millones; y los ingresos de titulizaciones hipotecarias y servicios se contrajeron un 35%.
En este contexto, Elizabeth Schroeder, analista de crédito senior de Loomis Sayles (gestora afiliada a Natixis Global AM), explica que su perspectiva para los bancos norteamericanos se mantiene "estable", aunque tiene "esperanzas" en que se produzca un cambio positivo este año.
Esta experta considera que es la Reserva Federal (Fed) la que tiene la llave para "cambiar el juego, pues en el caso de que comience a tomar los pasos necesarios hacia unas tipos de interés mayores en 2015, las ganancias de los bancos podría mejorar". Con todo, cree que son seis los factores a vigilar en este sector:
– La exposición a la industria energética. Ante la reciente caída de los precios del crudo, los bancos han comenzado a dar detalles sobre cómo "cuenta" este sector en sus balances. La mayoría ha informado de exposiciones inferiores al 3%, destacando los posibles beneficios positivos del desplome de las valoraciones del petróleo para la economía nacional y el gasto del consumidor. "Aunque es demasiado pronto para que vean el deterioro, los mercados estarán atentos a cualquier señal en este sentido", advierte.
– El crecimiento de los préstamos permanece "sin cambios" con la esperanza puesta en posibles subidas de tipos por parte de la Fed a finales de año. La mayor fortaleza, no obstante, la registran los créditos comerciales e industriales, mientras que en el área de consumo, se prevé otro ejercicio robusto para los préstamos para automóviles. "Espero que los hipotecarios se mantengan estables en el primer trimestre, porque cualquier aumento se vería compensado por los volúmenes estacionalmente más lentos ante la temporada primaveral", indica.
– La calidad de los activos se ha mantenido históricamente fuerte, podría producirse un ligero deterioro en 2015, así como un debilitamiento en los préstamos a petróleo y gas, especialmente, si los precios permanecen bajos. En cualquier caso, Schroeder no cree que esto sea "preocupante".
– Los ingresos relacionados con los tipos de interés podrían revertir los descensos, siempre dependiendo de los movimientos de la Fed… Se esperan bajos tipos y limitadas oportunidades para reducir los costes de financiación lo que mantendrá bajo presión a los márgenes de interés. "La mayor parte de los bancos han completado (o están cerca de hacerlo) los pasos para satisfacer sus necesidades de liquidez, por lo que dicha presión será menor", matiza.
– Probablemente la partida de "otros ingresos" se mantenga estable y sujeta a las tendencias estacionales habituales, con algunos aumento de la actividad hipotecaria a principios de año. Asimismo, con carteras "decentes", el área de banca de inversión permanecerá también sin cambios.
– Los gastos siguen siendo claves, pues los litigios judiciales y a la nueva regulación seguirán siendo importantes "vientos en contra". Ahora bien, la mayor parte de las entidades considera que sus principales causas pendientes con la Justicia ya han pasado y que estos costes deberían comenzar a reducirse después de 2015.
hemeroteca