De Guindos ha explicado en el Congreso de los Diputados que la desviación del déficit del 5% en 2015 iba a suponer un intenso ajuste que tendría un impacto negativo en la economía española. Bruselas ha establecido nuevos objetivos en el 3,6% para 2016 y del 2,9% en 2017, que supondrán de todas formas nuevos recortes del gasto. El ministro ha indicado que se cumplirá gracias al impulso de la economía española, el recorte de gasto de 2.000 millones anunciado por la Administración Central y la limitación de gastos en las Comunidades Autónomas.
El titular en funciones de la cartera de Economía ha reconocido que la Comisión Europea ha sido benevolente con España por la ausencia de Ejecutivo y la escasa perspectiva de formar Gobierno en las próximas fechas, al no exigir nuevas medidas para 2017 y esperar que parte de la reducción se produzca por el crecimiento económico.
De Guindos ha aclarado que el Plan Nacional de Reformas, donde deberían ir incluidas las medidas de corrección, solo se limitará a describir las reformas aplicadas. Además, ha admitido que la Comisión Europea ha exigido al Ejecutivo activar las normas de cumplimiento de déficit con la no disponibilidad de gasto para las Comunidades Autónomas.
El ministro ha confirmado que el Programa de Estabilidad que será remitido a Bruselas antes de final de mes contemplará una reducción de las previsiones económicas para los dos próximos años. El Gobierno ha recortado la proyección en 2016 de un crecimiento del 3% del PIB al 2,7% y en 2017, al pasar del 2,9% al 2,4%. De Guindos ha explicado que España no es ajena al deterioro de la economía mundial, aunque su impacto será mitigado por la inercia con la que ha entrado España en 2016, "la economía apenas ha perdido fuelle gracias a las reformas estructurales".
"Las nuevas proyecciones son realistas y conservadoras y están alineadas con las previsiones internacionales", ha resaltado. El nuevo cuadro económico se ha elaborado con la referencia de la cotización del petróleo en 40 dólares de media para 2016. De Guindos ha subrayado que la economía española seguirá con un crecimiento equilibrado y generando 900.000 puestos de trabajo en los dos próximos años, reduciendo el paro en un millón de personas, situándose a final de 2017 por debajo del 18%.
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