A pesar de ello, solo estamos en el comienzo de la verdadera revolución, y todavía queda un largo camino por recorrer. ¿Qué es lo que nos depara el futuro de la banca? Según los datos de la consultora McKinsey and Company, el cambio acelerado hacia los canales digitales en la banca continuará aumentando en los […]
Gestión y LiderazgoDirigentes Digital
| 28 abr 2021
A pesar de ello, solo estamos en el comienzo de la verdadera revolución, y todavía queda un largo camino por recorrer.
Según los datos de la consultora McKinsey and Company, el cambio acelerado hacia los canales digitales en la banca continuará aumentando en los próximos años, transformando la forma en que las instituciones financieras se relacionan con los clientes. A través del uso de la tecnología, los bancos podrán tener un mejor conocimiento de sus clientes para ofrecerles una comunicación y un asesoramiento personalizado.
A medida que se ha incrementado el uso de los canales digitales, ha caído la confianza de los clientes. Así lo señala el último informe 2020 Global Banking Consumer de Accenture, empresa multinacional de consultoría estratégica, servicios tecnológicos y externalización.
Esto refleja la necesidad que tienen los bancos de realizar cambios en las interacciones que ofrecen a los clientes a través de los distintos canales. La figura del asesor financiero juega un papel muy importante en este contexto de transformación digital. Sin ir más lejos, Salvatore La Porta, director comercial y responsable de la red de asesores de Banco Mediolanum, señala que “estamos en la edad de oro del asesoramiento financiero”. La Porta asegura que la pandemia de la Covid-19 ha aclarado el papel del asesor financiero, figura que en este banco español conocen como Family Banker, que consiste en trabajar sobre las necesidades y el perfil de sus clientes.
Este perfil es una de las profesiones con más futuro en el sector bancario. Este profesional de nueva generación pone a disposición de los clientes su experiencia y profesionalidad. De esta forma, informa y asesora a los clientes sobre cualquier necesidad de servicios bancarios, ahorros e inversión, para que tomen siempre las mejores decisiones. El rol del asesor financiero implica investigar el mercado y recomendar los productos y servicios más apropiados disponibles, asegurando que los clientes estén al tanto de los productos que mejor satisfacen sus necesidades, siempre teniendo en cuenta las preferencias de ahorro e inversión de cada persona.
La importancia de esta figura en la transformación digital en la banca radica en que establece con los clientes una relación de confianza para afrontar todos los aspectos relacionados con la gestión de sus recursos financieros. Este aspecto es fundamental para los bancos, ya que, como hemos comentado anteriormente, la confianza de los clientes ha caído con la irrupción de los canales digitales.
No cabe duda de que los asesores financieros han desempeñado una labor fundamental en este contexto de pandemia, debido a que han sido los encargados de explicar a los clientes lo que estaba ocurriendo en el sector bancario y los mercados financieros. La pandemia ha puesto en valor el asesoramiento financiero, demostrando que el papel de asesor financiero es más necesario que nunca.
En los últimos años, un total de 67.000 personas han obtenido un certificado como asesores financieros en España, según los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Una cifra que seguirá aumentando, ya que la figura del asesor financiero se ha convertido en una profesión imprescindible en el sector bancario.
Ahora más que nunca, cualquier persona con conocimientos en el sector puede convertirse en asesor financiero y construir su propio proyecto profesional, siempre y cuando sepa adaptarse a este nuevo escenario de transformación digital que está experimentando el mundo de la banca.
La profesión de la que hablamos es una firme opción de futuro para muchos profesionales. Hoy en día, los clientes están cada vez más preocupados por sus ahorros e inversiones, especialmente en momentos de incertidumbre como el que estamos viviendo. Por este motivo, necesitan a un profesional que los acompañe a lo largo de toda su vida financiera, tanto para ofrecerles asesoramiento personalizado en cada momento como para brindarles respuesta a todas sus necesidades, desde la liquidez hasta el ahorro, pasando por la compra de la vivienda o la jubilación.
Todo asesor financiero tiene la posibilidad de ser su propio jefe en la actualidad, debido a que puede gestionar su propia agenda de clientes, trabajar en un entorno flexible y dinámico, incluso elegir el lugar donde trabajar. Aunque los inicios no siempre son fáciles, hoy en día existe un modelo de banca basado en la figura de este profesional como único canal de asesoramiento con los clientes. Un modelo de negocio que se centra en las necesidades de sus asesores financieros, ofreciéndoles una formación continua desde el principio hasta el final de su carrera profesional y proporcionándoles las herramientas y los conocimientos necesarios para que puedan abrirse camino en el sector bancario.