Crear una empresa puede convertirse en un proceso largo debido a los múltiples trámites que hay que hacer y una de las dificultades con las que puede encontrarse un emprendedor es abrir una cuenta bancaria con una entidad tradicional. Fue esta problemática a la que se enfrentaron Steve Anavi y Alexandre Prot al constituir su […]
Gestión y LiderazgoDirigentes Digital
| 29 oct 2019
Crear una empresa puede convertirse en un proceso largo debido a los múltiples trámites que hay que hacer y una de las dificultades con las que puede encontrarse un emprendedor es abrir una cuenta bancaria con una entidad tradicional. Fue esta problemática a la que se enfrentaron Steve Anavi y Alexandre Prot al constituir su empresa (Smokio), una pésima experiencia a la hora de emprender. Este trámite no solo consumía mucho tiempo y era complejo, sino que tampoco incluía herramientas modernas para adaptarse a empresas digitales que buscan minimizar al máximo procesos administrativos o de poco valor añadido. Es por ello que decidieron abordar estas dificultades y crear Qonto, un neobanco de origen francés especializado en la operativa de las startups y pymes.
Para conocer la imagen que tienen los clientes españoles sobre los neobancos, cómo estos reinventan la experiencia de cliente así como dar unas pinceladas sobre la banca del futuro, DIRIGENTES habla con el Country Manager de Qonto en España, Carles Marcos i Guàrdia.
Hace relativamente poco tiempo que aterrizaron en España. ¿El mercado español es rentable para su solución?
Vemos que en España los grandes bancos están centrados o bien en las grandes multinacionales o en la banca particular. Pymes, autónomos y startups siempre han sido el segmento menos interesante y, por qué no, más desatendido. Nosotros queremos posicionarnos como la solución de referencia para ellos.
Nuestro servicio resuelve muchas de las dificultades diarias a las que tienen que enfrentarse los usuarios a la hora de gestionar sus finanzas. Declarar impuestos o justificar ingresos es una tarea tediosa, por lo que cada vez es más común que los usuarios empleen su cuenta personal para resolver estas gestiones. Esto puede suponerles una dificultad en el desarrollo de su actividad profesional diaria.
Relacionado con la anterior cuestión, a su parecer, ¿cómo son los clientes españoles? ¿Qué imagen tienen sobre los neobancos? ¿Cuál cree que es su grado de aceptación?
Tener la confianza de los usuarios es un factor clave para una entidad bancaria. En los últimos años, la banca tradicional ha perdido este valor y ha querido ofrecer el mismo producto, pero “adaptado” a las nuevas inquietudes. Sin ataduras, sin letra pequeña, sin sorpresas de última hora. Esto es lo que los usuarios han reclamado a los bancos y estos no han sabido dar, han camuflado sus productos y los han “modernizado” para llegar a un usuario exigente, pero sin éxito.
El empresario español busca, por encima de todo, gestionar sus finanzas de la forma más eficiente e inmediata posible, evitando el papeleo y beneficiándose de asistencia personalizada y tarifas reducidas. Los neobancos se han presentado como la solución perfecta para ellos, ya que cubren todas estas necesidades y superan las debilidades de la banca tradicional.
¿ De qué manera reinventan la experiencia de cliente los neobancos?
Principalmente les descubren nuevas posibilidades. Aumentan las expectativas en cuanto a estos nuevos actores, ya que les ofrecen y solucionan todo aquello que la banca tradicional no hacía. No hay pérdida de tiempo, se establece un servicio personalizado, una atención mucho más cercana e inmediata a la par que accesible y transparente. Una alternativa para todo aquello que consideraban un lastre.
Las noticias negativas sobre el sistema bancario se suceden día a día, ¿qué considera que ha hecho mal la banca para llegar a esta situación?
La banca tradicional se ha centrado en hacer creer a los clientes que necesitan lo que estas entidades venden. Los usuarios se han dado cuenta de la realidad al ver sus finanzas en riesgo. Esto ha derivado en una progresiva pérdida de confianza. En el primer trimestre del año, seis de los ocho grandes bancos de España han empeorado su rentabilidad respecto al año anterior.
Un ejemplo de esta situación podría ser la reciente quiebra de Thomas Cook, de la que los bancos también tienen su parte de responsabilidad, ya que es dudosa la intención de los acreedores de comprometerse con el paquete de rescate financiero. El paquete comenzó con un valor de 848 millones de euros respaldados por el mayor accionista de Thomas Cook, Fosum; para acabar con 1.224 millones de euros.
Ante esto la respuesta de la banca es achacar el motivo de la quiebra a los problemas de la empresa. No es de extrañar que muchos usuarios busquen otras alternativas que les ofrezcan soluciones rápidas, transparentes y sencillas.
Por otro lado, la digitalización es un factor muy relevante. La mayoría de las entidades tradicionales cuentan con plataformas complejas que suponen un gasto de energía y una pérdida de tiempo para los usuarios. Los neobancos han sabido dar respuesta a estos inconvenientes.
¿Cuáles son las perspectivas y los objetivos de Qonto para este ejercicio?
Actualmente estamos en un muy buen momento, ya que estamos muy cerca de nuestros primeros clientes. Esto nos ayuda a comprender qué buscan y poder adaptar nuestro producto la más rápido posible. Estamos creciendo rápidamente y la captación está siendo muy buena. De hecho, hemos doblado el equipo dedicado al mercado español en menos de 6 meses. A medio plazo queremos reinventar y mejorar el sector bancario, facilitando la gestión bancaria y convirtiéndose en el banco de referencia para empresas y autónomos.
Desde su experiencia y conocimientos, ¿cómo imagina que será la banca online en los próximos años?
No cabe duda de que el Fintech es el futuro. La banca tradicional se ha visto superada por este sector que parte de las finanzas y la tecnología para ir un paso por delante de todo aquello que engloba la banca tradicional.