Aunque el sector público ha venido liderando el camino hacia una mayor transparencia, las empresas se están sumando a la ola, conscientes de los beneficios que puede suponer, no solo a nivel de personal. “La transparencia es una parte de la identidad de las compañías”, tal y como la define Jaime Guibelalde, de Page Executive […]
Gestión y LiderazgoDirigentes Digital
| 31 oct 2019
Aunque el sector público ha venido liderando el camino hacia una mayor transparencia, las empresas se están sumando a la ola, conscientes de los beneficios que puede suponer, no solo a nivel de personal. “La transparencia es una parte de la identidad de las compañías”, tal y como la define Jaime Guibelalde, de Page Executive en España.
Dicha empresa ha elaborado un estudio en el que analiza las principales tendencias que deben tener en cuenta los dirigentes. La transparencia es una de ellas, si bien Guibelalde es consciente de que el recorrido no puede hacerse “de un día para otro, aunque el camino parece estar claro”. Así, esta cualidad ayuda al ámbito privado a acortar distancias en “ámbitos socialmente deseables”.
La concienciación acerca de esta necesidad no solo atañe a los mandatarios de las organizaciones, sino también a los trabajadores. En un sentido más amplio, considerando al conjunto de los profesionales, un estudio realizado por Sprout Social en Estados Unidos reveló que existe un gran consenso en poner la transparencia como uno de los valores fundamentales. En concreto, el 86% de los estadounidenses consideran que es clave.
Para Guibelalde, la transparencia es una cuestión de negocio, a pesar de que en España no se perciba de ese modo. Para este experto, constituye “una buena posibilidad de atraer el mejor talento y los mejores inversores”. En esa línea, hay un largo recorrido hasta que se consiga una transparencia acorde con lo deseable. De hecho, según datos del Ibex, solo el 14% distribuye información acerca de las condiciones salariales de sus empleados.
Por ello, el hecho de aportar más información puede hacer más atractiva la compañía para el talento. También supone una palanca de apoyo para reducir la brecha de género. En esto, España aún puede progresar, dado que se encuentra en el puesto número 29 de un total de 149 países, según la clasificación que elabora el Foro Económico Mundial.
Por otra parte, no solo representa el beneficio de atraer talento. Según un informe de EY acerca de inversión, llamado Tomorrow’s Investment Role, el 96% de los inversores se interesa por información de carácter no financiero. Así, se puede concluir que la inmensa mayoría de la inversión toma en cuenta datos que no solo tienen que ver con el retorno económico a la hora de tomar decisiones.
Pese a que pueden obtenerse dichos beneficios, el informe de Page Executive analiza hasta qué punto debe apostarse por la transparencia. En particular, aborda la trascendencia que puede tener sobre el personal. Así, se observa que es recomendable limitar la información a nivel salarial. En un ejemplo concreto, se cita el caso de un proceso de selección. El hecho de aumentar la oferta de salario y comunicarlo al resto de la plantilla puede causar desmotivación entre el equipo existente.
Así, una situación en la que exista una transparencia total puede resultar en un ambiente de trabajo tenso, tal y como concluye un estudio de Harvard Business School. Que exista información de todos y al alcance de todos los miembros de un equipo puede crear una necesidad de actuación por parte de dichos trabajadores para justificar dicha información o para no dar una impresión equivocada. Por tanto, desde este análisis se expresa que los trabajadores deben recibir la información “necesaria y suficiente” para conocer cómo está la empresa, pero no un exceso que pueda crear incomodidad.