“El primero que se va a dar la vacuna soy yo”, dijo este jueves (10) el presidente de Argentina, Alberto Fernández, al anunciar la compra de 10 millones de dosis de la Sputnik V (del instituto Gamaleya) con fecha de entrega en febrero de 2021. El lote anunciado se suma a otra compra ya confirmada […]
InternacionalDirigentes Digital
| 11 dic 2020
“El primero que se va a dar la vacuna soy yo”, dijo este jueves (10) el presidente de Argentina, Alberto Fernández, al anunciar la compra de 10 millones de dosis de la Sputnik V (del instituto Gamaleya) con fecha de entrega en febrero de 2021.
El lote anunciado se suma a otra compra ya confirmada de 22 millones de dosis de AstraZeneca y a los contratos con Pfizer y Jansen que podrían firmarse si concluyen positivamente las negociaciones que están en marcha.
La declaración del argentino es parte de las disputas políticas latinoamericanas que giran en torno de las vacunas contra covid-19 y también evidencia la aspiración de obtener la primacía en las campañas de vacunación a medida que se acerca fin de año.
El caso más notorio de las batallas políticas tal vez sea el de Brasil, donde el presidente Jair Bolsonaro y el gobernador João Doria (São Paulo) dirimen públicamente una confrontación por proveedores y por la obligatoriedad de la inmunización.
Mientras el primero se comprometió a comprar a AstraZeneca (260 millones) en 2021, el segundo ya anunció que está fabricando dosis de Coronavac y comenzará a vacunar el 25 de enero. El ministro de Salud, Eduardo Pazuello, dijo que negocia con Pfizer (70 millones) y que aseguró 300 millones de dosis de varios laboratorios.
México, por su parte, tiene acuerdos preliminares con Pfizer (34,4 millones) y AstraZeneca/Oxford (77,4 millones), además de haber confirmado ya la compra a CanSino (35 millones). Jansen realiza ensayos de fase 3 y los laboratorios Novavax y Curevac también buscan su oportunidad de venderle al país gobernado por Andrés Obrador.
Estos países también han suscrito el programa Covax Facility, avalado por la OMS, para adquirir vacunas de eficacia probada en condiciones de “acceso equitativo”. Pero difieren sobre obligar a los ciudadanos a ser vacunados.
En México será voluntario, dijo el subsecretario de Salud de México, Hugo López-Gatell, que anunció una campaña de persuasión mostrando los beneficios de vacunarse. “No se le puede imponer a nadie el vacunarse”, dijo.
En Argentina tampoco se obligará a nadie, aunque el gobierno tratará de “convencer” a los ciudadanos. Pero “de ninguna manera” será obligatorio pues “es una vacuna que se usa por primera vez y “habrá que adquirir bastante experiencia”, dijo el ministro de Salud Ginés González García.
En Brasil, por último, mientras el presidente Bolsonaro anticipó que no se la pondrá y que la ofrecerá como optativa a la población, el gobernador Doria ha dicho que hará “todo lo posible” para que sea obligatoria.
“No tiene sentido” que unos se vacunen y otros no, pues así continuará el contagio, argumentó el segundo, mientras que el primero mantiene su postura de considerar a la covid una “simple gripe”.
Este jueves, los casos de contagio de covid reportados por Argentina, México y Brasil fueron de 1,5 millones, 1,2 millones y 6,7 millones, respectivamente. Latam como un todo sigue siendo la región más afectada del planeta.
