Durante 2020, los precios del porcino han sufrido una volatilidad enorme, disparando las exportaciones desde España un 200%. Y los argentinos, conscientes de su potencial enorme en este sector, están estudiando adecuar su oferta a la creciente demanda china. Argentina, actualmente, busca inversiones chinas para producir 100 millones de cerdos antes de 2028. Con esto, […]
InternacionalDirigentes Digital
| 11 dic 2020
Durante 2020, los precios del porcino han sufrido una volatilidad enorme, disparando las exportaciones desde España un 200%. Y los argentinos, conscientes de su potencial enorme en este sector, están estudiando adecuar su oferta a la creciente demanda china.
Argentina, actualmente, busca inversiones chinas para producir 100 millones de cerdos antes de 2028. Con esto, Argentina sería el primer productor mundial, e igualmente se podría garantizar un abastecimiento seguro del mercado chino. La inversión total necesaria estaría en torno a los 28.000 millones de dólares. Y serviría para construir entre 180 – 280 granjas de cerdos en toda Argentina (permitiendo una exportación anual de nueve millones de toneladas métricas). Esto permitiría exportar hasta veinte mil millones de dólares, anualmente, de cerdo argentino a China. Crearía cien mil puestos de trabajo directos para la economía local. Y serviría, también, para un mejor uso e incremento del valor añadido de los granos producidos actualmente en Argentina (maíz / soja). Sin embargo, según ha podido saber DIRIGENTES, el gobierno argentino no desea verse demasiado involucrado en esta iniciativa. Aconseja, mejor, limitarlo a un acuerdo del sector privado.
Pero los inversores chinos desean encuadrarlo en un marco más formal, de relación entre gobiernos, como pudiera ser la iniciativa Belt & Road (BRI). Pero el gobierno argentino teme, sobre todo, a la opinión pública. Casi un millar de asociaciones animalistas, o defensoras del medioambiente, han firmado un manifiesto titulado “No queremos transformarnos en una factoría porcina para China ni en una fábrica de nuevas pandemias”. “A falta de un análisis más exhaustivo, es razonable advertir la mano de EE.UU. en estas movilizaciones sociales, abiertamente contrario a BRI”, señalan otras fuentes a DIRIGENTES. Estos hechos, incluso, han hecho estudiar la posibilidad de distribuir esas inversiones entre otras naciones como España (donde ahora se producen 4.6 millones de toneladas, según datos del 2019).