Christian Sewing es el malo en un juego que parece ser difícil a ganar para Deutsche Bank, viendo el contexto del sector donde salen cada vez más competidores mucho más ágiles y que juegan además con otras reglas. Pero los problemas del banco más grande de Alemania son ya de muchos años atrás y nadie […]
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| 05 jul 2019
Christian Sewing es el malo en un juego que parece ser difícil a ganar para Deutsche Bank, viendo el contexto del sector donde salen cada vez más competidores mucho más ágiles y que juegan además con otras reglas. Pero los problemas del banco más grande de Alemania son ya de muchos años atrás y nadie de los muchos CEOs que lo han intentado desde 2008 han tenido éxito. Sewing hace ahora el último intento para cambiar el rumbo de Deutsche Bank, después de que parece enviable una fusión con Commerzbank. Ha anunciado que se reduce la parte de banca de inversión y también se están analizando vender partes. También se esperan cambios en el consejo de administración. Lo más probable en la parte de regulación y del negocio en Asia, por los pocos resultados que dan. No paran los problemas de Deutsche Bank con la justicia. Investigaciones policiales, juicios y controles laxos han dañado seriamente la imagen de la entidad.
Ahora empieza a verse afectado también el “core business”: En la primera mitad del año, Deutsche Bank ha reducido su negocio de banca de inversión por un 20% comparado con el mismo periodo del año anterior. Con ingresos de 1.100 millones de euros ocupa el octavo lugar de los mayores bancos de inversión y así la brecha con sus competidores ha aumentado. En la parte superior están JP Morgan y Goldman Sachs. Bank of America ocupa el tercer lugar y Morgan Stanley el quinto. Citi sigue siendo el cuarto. Credit Suisse y Barclays se clasificaron como los mejores bancos europeos.
Reorganización suena bien, pero…
Aunque la restructuración de Deutsche Bank es una buena notica, la mala es que cuesta dinero, algo que el banco no tiene. Se estima que pueden ser hasta 5.000 millones de euros que hay que calcular para la reorganización. Según círculos financieros esto causará más perdidas para 2019. La acción ya está en mínimos. Sewing intenta financiar esta restructuración sin ampliación de capital. Según círculos del banco Deutsche Bank está negociando para cambiar su cuota de “core capital”. Ahora está en un 13,7% y se podría bajar hasta el 13%. Como Deutsche Bank no ha hecho sus deberes en el pasado, los cambios parecen todos de golpe.
Se planifica cortar hasta 20.000 puestos de trabajo, un tercio de la plantilla. No está claro todavía en que tiempo se realizará este programa de reducción de empleo. Ya el año pasado Deutsche Bank recortó 7000 puestos. El proceso se iniciará en EE.UU y Reino Unido, donde es más fácil despedir. Aunque Deutsche Bank acaba de pasar la prueba de estrés de EEUU, se estima que podría estar explorando el interés de compra de competidores como Citigroup y BNP Paribas para su negocio de acciones, como informa el Wall Street Journal. Sobre todo para mejorar su valor en bolsa y también sus resultados.