Más allá de la cuarta subida de tipos de este año de la Reserva Federal (Fed), el organismo encabezado por Jerome Powell hizo públicas sus expectativas sobre la economía estadounidense. Ni siquiera Estados Unidos es inmune a la ralentización de la economía global, lo que se reflejará en el crecimiento que experimentará el país que […]
InternacionalDirigentes Digital
| 20 dic 2018
Más allá de la cuarta subida de tipos de este año de la Reserva Federal (Fed), el organismo encabezado por Jerome Powell hizo públicas sus expectativas sobre la economía estadounidense. Ni siquiera Estados Unidos es inmune a la ralentización de la economía global, lo que se reflejará en el crecimiento que experimentará el país que preside Donald Trump.
La principal economía del mundo elevará su crecimiento al 3% este año, desde el 2,2% que ascendió en 2017. No obstante, aunque esa estimación recoge una aceleración considerable, supone la revisión por parte de la Fed de su anterior proyección de septiembre, cuando calculó que la economía norteamericana iba a crecer un 3,1% en 2018.
Aunque no es una rectificación alarmante, la previsión para 2019 arroja más pistas. El año que viene el crecimiento alcanzará el 2,3% según la Fed, una cifra dos décimas inferior a la prevista por esta organización en septiembre. En cuanto a 2020 y 2021, las expectativas se mantienen, con tasa del 2% y del 1,8% respectivamente, que denotan una ralentización de la producción estadounidense.
En ese sentido y con respecto a la última subida de tipos de la Fed, Jerome Powell ha dejado la puerta abierta a un posible cambio de rumbo en la política de tipos. Reconoce que las proyecciones que acaban de publicar pueden “requerir más que un ligero cambio” de la política llevada a cabo por la Fed durante este año. En todo caso, Powell afirma que adaptará su política para “mantener la expansión” de la economía estadounidense.
Una de las proyecciones más interesantes de la Fed se refiere al empleo. En este sentido, las últimas previsiones no difieren en gran medida de las que se publicaron en septiembre, pero arrojan un dato llamativo. El desempleo alcanzará su mínimo en el 3,5% en 2019, aunque puede situarse incluso por debajo de esa tasa durante algunos meses.
De cumplirse la previsión de la Fed significaría que Estados Unidos alcanzaría la tasa de empleo más baja en 50 años, desde que en 1968 el ratio de desempleo se estableció en el 3,4%.
El caso es que el descenso desde el 3,7% en el que acabará este año encontrará su tope el año que viene. A partir de entonces, el paro se elevará una décima anual, hasta alcanzar el 3,8% en 2021. A pesar de ello, desde la Fed relatan que “el mercado de trabajo ha continuado fortaleciéndose y la actividad económica ha aumentado a un ritmo elevado”.