Comienza la cuenta atrás para una fecha clave marcada en el calendario. El próximo 29 de enero se votará la alternativa al Brexit que la primera ministra británica presenta este lunes tras las conversaciones mantenidas con los partidos políticos representados en Westminster así como con dirigentes de la UE. Tras el estrepitoso fracaso del Plan […]
InternacionalDirigentes Digital
| 21 ene 2019
Comienza la cuenta atrás para una fecha clave marcada en el calendario. El próximo 29 de enero se votará la alternativa al Brexit que la primera ministra británica presenta este lunes tras las conversaciones mantenidas con los partidos políticos representados en Westminster así como con dirigentes de la UE.
Tras el estrepitoso fracaso del Plan A para llevar a cabo una salida ordenada del grupo de los 27 del pasado martes, la jefa del Gobierno presentará al Parlamento su Plan B. No obstante, las líneas generales que esbozan esta nueva vía parecen no distar en gran medida a las anteriores. Y se espera que antes del día 29 los diputados conservadores y laboristas presenten sus enmiendas.
A falta de menos de 70 días de la fecha límite en la que se debe presentar una decisión (29 de marzo) el Parlamento continúa estando dividido y aún no se han establecido los términos de esta separación. Un hecho que hace más posible la amenaza de llegar a ese día con un Brexit sin acuerdo.
El diario británico ‘The Sunday Times’ señaló el domingo que la primera ministra podría estar buscando un acuerdo con el Gobierno de Irlanda para retirar el acuerdo de backstop en la frontera. Sin embargo, este lunes ha negado que vaya a participar en conversaciones bilaterales con Reino Unido acerca de este tema.
Este proceso se está extendiendo sobremanera en el tiempo y las reacciones no hacen más que sucederse. Esta vez el protagonista ha sido el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell. Ha señalado la importancia de poner fin a este proceso “lo más rápido posible” para que no llegue a convertirse en un problema crónico. Asimismo, ha indicado tajantemente que en cualquier caso lo que no puede llegar a suceder es que “se proclame el Brexit y luego se suspendan los efectos”, tal y como sucedió con la declaración de independencia de Cataluña.
Asimismo, los Gobiernos de España y Reino Unido han firmado un acuerdo bilateral para que, tanto los españoles que residen en Reino Unido (175.000 ciudadanos) como los británicos que viven en España (300.000 habitantes) puedan continuar votando en las elecciones municipales tras el Brexit.
La firma del acuerdo se enmarca en el deseo de ambos Gobiernos por garantizar los derechos de los ciudadanos ante el Brexit y fue protagonizada por el secretario de Estado para la Unión Europea, Marco Aguiriano, y su homólogo británico para el Brexit, Robin Walker. Este último señaló que “aunque Reino Unido se prepara para dejar la UE, seguimos siendo un país europeo y valoramos las contribuciones de todos los europeos, vengan de donde vengan, a nuestro país y nuestra democracia”.