En DIRIGENTES damos a conocer cada día cuáles son los temas que preocupan a grandes y pequeños empresarios a través de las redes sociales. Hoy, viernes 23 de diciembre, algunos de los más llamativos en LinkedIn hablan sobre cómo el dinero en efectivo termina el año perdiendo aún más terreno frente a las transaciones digitales a través de Bizum, PayPal, etc... o cómo las familias se han visto obligadas a recortar sus gastos en los regalos esta Navidad a favor de mantener un buen menú estas fiestas.

El menú navideño se impone a los Reyes por Miguel Ángel Moreno Ramos

La que algunos ya denominan 'la Navidad de la inflación' está obligando a las familias a resolver un dilema: dónde recortar los gastos — el 44% ya ha tenido que hacerlo — para combatir las subidas de precios. Y por lo que parece, los regalos serán los principales damnificados en pro de salvar las comidas navideñas. Entre el 30 de noviembre y el 6 de diciembre, la facturación del sector de la alimentación ha aumentado un 15% respecto al año anterior, mientras que las marcas de ropa, electrónica o juguetes han caído un 6% en términos reales, según datos de la Agencia Tributaria.

Bizum está enterrando tu monedero por Andrés Valdés López

El dinero en metálico sigue siendo el rey de la economía real en España, pero cede terreno a las transacciones digitales. Bizum, PayPal y similares, sobre todo, y las transferencias bancarias, en menor medida, ya canalizan un 21,5% de los pagos en el país. Lo interesante de este dato que ofrece el Banco de España es la rapidez de esta sustitución: en 2019, el 91% de las operaciones se hacía en metálico, mientras que sólo se ha elegido esta modalidad en 2022 para el 71% de las transacciones. Parece que el fin, o el uso marginal, de los monederos está realmente cerca.

Así evaluarán el trabajo de los funcionarios por Virginia Collera

Los trabajadores públicos que suspendan de forma “continuada” las pruebas de desempeño podrán ser apartados de su puesto. Así lo establece el anteproyecto de ley de Función Pública para la Administración General del Estado (AGE), que ayer aprobó el Consejo de Ministros y que todavía está sujeto a cambios –los sindicatos son críticos–. Los funcionarios que hayan accedido por concurso podrán ser depuestos si no cumplen con sus tareas, si su rendimiento es bajo o si no pueden satisfacer las exigencias del cargo ni siquiera con formación adicional. La metodología de evaluación aún no está definida: se concretará durante el desarrollo de la norma. Esta reforma de la Administración responde a los compromisos adquiridos con Bruselas a cambio de los fondos del Plan de Recuperación.