El brote del nuevo coronavirus que ha acabado convirtiéndose en una pandemia ha protagonizado gran parte de la Junta General de Accionistas del Banco Santander. Dicha asamblea se ha celebrado en la sede del banco en Boadilla del Monte (Madrid), a diferencia de ediciones anteriores, que tuvo lugar en Santander. La presidenta, Ana Botín, afirma […]
NacionalDirigentes Digital
| 03 abr 2020
El brote del nuevo coronavirus que ha acabado convirtiéndose en una pandemia ha protagonizado gran parte de la Junta General de Accionistas del Banco Santander. Dicha asamblea se ha celebrado en la sede del banco en Boadilla del Monte (Madrid), a diferencia de ediciones anteriores, que tuvo lugar en Santander.
La presidenta, Ana Botín, afirma que el BCE, así como la Autoridad Bancaria Europea (EBA, en sus siglas en inglés) han reiterado la necesidad de que los bancos procedan con cautela en lo que se refiere al reparto de dividendos. “El BCE nos ha reiterado su decidido parecer a suspender la distribución de dividendos”, asegura Botín, quien explica que dichos fondos deben servir para crear líneas de crédito que ayuden a los ciudadanos y empresas a superar la situación generada por el COVID-19.
En ese sentido, Santander ha aplicado la recomendación de estas instituciones, al suspender el dividendo complementario del pasado 2019, tal y como transmitió en un comunicado a la CNMV. Además, ha puesto en cuarentena su política de remuneración al accionista en 2020. En ese sentido, el banco celebrará una nueva junta en octubre en la que propondrá dedicar el resultado de 2019 íntegramente a reservas. De ese resultado hay que exceptuar lo que ya se ha distribuido, por lo que la suma total ascendería a 1.661 millones de euros.
De ese modo, Santander espera que en octubre la situación permita evaluar el impacto del nuevo coronavirus. Por ello, “la intención del consejo es ahora no proponer la distribución de dividendos a los accionistas hasta que no exista mayor visibilidad sobre los efectos de la crisis del COVID-19 y se conozcan los resultados del ejercicio 2020”.
Durante su intervención, la presidenta ha explicado que el banco se ha decidido a “cerrar una parte significativa” de su red, de modo que se reduzca la exposición de sus empleados y los clientes a posibles contagios. No obstante, Botín ha explicado que “esta crisis no es financiera”, y afirma que la banca tiene mucho que decir en esta coyuntura: “Los bancos somos parte de la solución”.
En todo caso, Botín reitera que la decisión sobre el dividendo de 2020 se pospone. “La intención es no proponer la distribución de dividendos hasta que se conozcan los efectos de la crisis del COVID-19”, aclara Botín. En ese momento, se hará una propuesta concreta.
En cuanto al modo en que se está enfrentando la crisis, Botín afirma que “las empresas necesitan el apoyo del Gobierno”, y que es responsabilidad del Estado proteger a los más vulnerables. Por otro lado, cree que se debe planificar lo más pronto posible el regreso a la actividad.
Asimismo, cree que “es esencial” proporcionar el impulso necesario a las empresas, de manera que se recupere el empleo “lo antes posible”. Por otro lado, reclama a Europa una respuesta “más rápida y más coordinada”. “Es el momento de mostrar la cara más solidaria de Europa. Sin solidaridad no hay unión”, recuerda Botín.