“La accesibilidad es un gran negocio turístico que no se está aprovechando”. Así de contundente se muestra el arquitecto Enrique Rovira-Beleta, en relación a la falta de puntos de acceso en algunos lugares de la geografía española. Un factor que para personas con discapacidades permanentes o temporales supone un obstáculo a la hora de elegir […]
NacionalDirigentes Digital
| 02 ago 2018
“La accesibilidad es un gran negocio turístico que no se está aprovechando”. Así de contundente se muestra el arquitecto Enrique Rovira-Beleta, en relación a la falta de puntos de acceso en algunos lugares de la geografía española. Un factor que para personas con discapacidades permanentes o temporales supone un obstáculo a la hora de elegir destino.
Se estima que más de 3,3 millones de personas se ven obligadas a renunciar a un viaje por los motivos anteriormente expuestos, una cantidad que incluye tanto las personas con necesidades de accesibilidad, como sus acompañantes.
“En un contexto récord de envejecimiento, la mayor inversión en accesibilidad promovería el turismo senior y éste, a su vez, un descenso en los niveles de estacionalidad”, asegura el director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, quien también incide en que este factor derivaría en ingresos extra para el sector, reduciendo la temporalidad del empleo en el turismo y, por ende, el mantenimiento de las cotizaciones salariales y el ahorro de los subsidios de desempleo.
En este sentido, la segunda edición del informe ‘Turismo inclusivo y empleo’, elaborado por la Fundación Adecco, arroja que podrían generarse unos 90.806 nuevos puestos de trabajo relacionados con el turismo accesible nacional procedentes de segmentos muy diversos como transporte, alojamiento, restauración, comidas y bebidas.
Si a dicha cantidad se le añaden otros 14.000 nuevos contratos adicionales generados en el ámbito de la Información y Comunicación accesible, el potencial de nuevos empleos ascendería a 104.806, según los cálculos del informe. En concreto, estos últimos se encargarían de optimizar la experiencia del usuario del turista con necesidades de accesibilidad como, por ejemplo, posibilitar la navegación en las webs de reservas de viajes, generar aplicaciones móviles, así como otras adaptaciones que permitieran al usuario acceder a la oferta turística en “igualdad de condiciones”.
El grupo de Recursos Humanos incide en que si bien a lo largo de la última década se han realizado esfuerzos para conseguir un turismo para todos, en España esta industria no contempla las necesidades globales del turista. Según Adecco, en el momento actual, existe una gran desconexión en todas las fases que componen un viaje y que abarcan desde la reserva online, pasando por el desplazamiento hasta el punto de salida o el acceso al alojamiento turístico.
En este sentido, crítica que el desarrollo del turismo accesible se haya basado en la publicación de guías de viaje que recogen destinos y servicios accesibles, sin contemplarla de manera integral. Además, asegura que la información que aparece no se encuentra sujeta a estándares y, por ello, no resulta fiable a los usuarios.
Otro de los retos pendientes que tiene la accesibilidad universal en España pasa por la normalización de costes. Por regla general, solo los hoteles con alto poder adquisitivo disponen de este tipo de instalaciones y ubicadas, en su mayoría, en espacios “menos atractivos” del inmueble. “Las actuaciones de accesibilidad continúan siendo demasiado evidentes y especiales, sin embargo, la accesibilidad de calidad es la que pasa desapercibida”, subrayan en el informe. Para ello, la solución pasaría por adecuar tanto productos como servicios, espacios y comunicaciones con el objetivo de que sirvan a cualquier colectivo.