Con el arranque de la temporada turística a la vuelta de la esquina, las compañías se preparan para una campaña atípica, marcada por los protocolos sanitarios y los requisitos que deberán cumplir los viajeros, según el destino. En este contexto, el sector lleva tiempo pidiendo al Gobierno que se haga cargo de las pruebas PCR […]
NacionalDirigentes Digital
| 19 may 2021
Con el arranque de la temporada turística a la vuelta de la esquina, las compañías se preparan para una campaña atípica, marcada por los protocolos sanitarios y los requisitos que deberán cumplir los viajeros, según el destino. En este contexto, el sector lleva tiempo pidiendo al Gobierno que se haga cargo de las pruebas PCR de los visitantes internacionales. La última en pronunciarse al respecto ha sido la hotelera Meliá. En el marco de la Feria Internacional del Turismo (Fitur), el consejero delegado del grupo, Gabriel Escarrer, ha asegurado que se trata más bien de una una inversión y no un gasto que permitiría reactivar el mercado lo “antes posible”.
El dirigente ha señalado la necesidad de avanzar en el desarrollo del denominado ‘pasaporte sanitario’, con el objetivo de agilizar los desplazamientos de las personas vacunadas, para luego centrarse en aquellos que no han sido inmunizados, ofreciéndoles test de COVID-19 gratuitos. Escarrer ha puesto como ejemplo Francia, donde no tienen coste para el turista.
La propuesta va en línea con la postura adoptada por la Unión Europea, desde la que también propusieron esta medida con objeto de evitar discriminar entre los europeos que sí podrán viajar sin costes adicionales por el hecho de estar protegidos contra el virus.
Frente a esta situación, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, se ha desmarcado de esta iniciativa, tras afirmar que para las arcas del Estado es “difícil” hacer frente a este gasto, ya que supondría un “cargo extra”. A su juicio, argumenta la existencia de “otras prioridades” en el momento actual, como la prórroga de los ERTE o la generación de confianza que haga posible la recuperación de este mercado, que ya detecta los primeros compases de actividad por el impulso de la demanda nacional.
La responsable de la cartera ha afirmado que España espera alrededor de 45 millones de turistas este año, algo más de la mitad de los recibidos en 2019. En todo caso, es una cifra acorde con las estimaciones que barajan desde el sector. Hay que tener en cuenta que Reino Unido, principal emisor de turistas hacia nuestro país, mantiene en la categoría ámbar del semáforo epidemiológico a España, lo que se traduce en que desaconseja, pero no prohíbe, pisar suelo español para pasar las vacaciones. Situación que, de mantenerse, podría alterar el flujo de llegadas previsto. De hecho, Escarrer considera que cerrar un verano aceptable en clave turística queda supeditado a que el país británico cambie dicho semáforo a color verde.
Desde Bruselas ya han acordado la reapertura de fronteras exteriores a terceros países para todas aquellas personas que hayan sido inoculadas con algunas de las vacunas aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), entre ellos, Estados Unidos o Reino Unido. Entre los requisitos figura haber recibido la pauta completa catorce días antes del viaje, según el acuerdo alcanzado por el club comunitario. En cualquier caso, esta decisión todavía no se ha formalizado.