Es una paradoja: la demanda de aerogeneradores nunca ha sido tan grande como en estos días. Aun así, la situación de los operadores es cada vez más complicada. Según una encuesta en Alemania en las localidades pequeñas de menos de 5.000 habitantes, sólo el 49 por ciento apoya la expansión. En las ciudades más grandes […]
NacionalDirigentes Digital
| 02 may 2022
Es una paradoja: la demanda de aerogeneradores nunca ha sido tan grande como en estos días. Aun así, la situación de los operadores es cada vez más complicada. Según una encuesta en Alemania en las localidades pequeñas de menos de 5.000 habitantes, sólo el 49 por ciento apoya la expansión. En las ciudades más grandes con más de 50.000 habitantes, es el 67 por ciento. Todo esto complica que se realicen los proyectos eólicos en el porfolio de los operadores que aumentan pérdidas y deudas. Siemens Gamesa ha publicado para el segundo trimestre del año fiscal de 2022 unos ingresos de 2.200 millones de euros y un Ebitda negativo de 304 millones de euros, aunque se han asignado nuevos contratos por el valor de 1.200 millones de euros. Francisco Belil debe ahora ayudar a cambiar la suerte de la empresa hispano-alemana, sin embargo no lo va a tener fácil porque muchos problemas son estructurales. Le acaban de nombrar para formar parte del consejo de administración de Siemens Gamesa. No es un desconocido en el mundo. Ha sido el presidente de la Cámara de comercio alemana y también CEO de Siemens España durante mucho tiempo.
Sus contactos a todos los niveles deberían ayudar para acelerar algunos proyectos pero los problemas de suministro a nivel global no los pueden solucionar él. Aunque ya tiene 75 años, Belil sigue moviéndose entre las dos culturas y el negocio que se ha creado en las últimas décadas en este ámbito dónde las renovables, sin duda, son una fuente de inversión muy grande desde hace décadas y España tendrá para Alemania un papel importante en la producción del hidrógeno verde. Los fondos europeos Next Generation y el forzado plan de transición energética de Bruselas aumentarán sin duda las oportunidades en el mundo eólico, “aunque sigue siendo una fuente energética que por sí misma consume mucha energía y recursos en la producción de los molinos y es por ello poco sostenible,” dice el físico español y experto energético en el CSIC de Barcelona, Antonio Turiel. Como es mucho más rápido y económico montar un parque solar, Siemens Gamesa se encuentra en una situación muy complicada desde hace bastante tiempo, igual que Nordex a pesar de que, por el momento, no hay alternativa a la eólica, que también puede generar energía por la noche, a diferencia de la fotovoltaica.
Según su CEO, José Luis Blanco, seguirá Nordex también este año perdiendo. En 2021 ha registrado unas pérdidas netas de 230 millones de euros después de los 130 millones en rojo el año anterior. Los competidores de Nordex, Siemens Gamesa, Vestas y General Electric, pasan más o menos por las mismas dificultades. "Toda la industria está en una situación de rentabilidad terrible, no solo nosotros", dice Blanco. La bancarrota de la alemana Senvion, que en parte ha vendido sus activos a Siemens Gamesa, ha asustado a un sector que parece morir de su propio éxito. Sin embargo, la inflación en la electricidad y el objetivo europeo de independencia en el suministro energético debido a la guerra de Rusia en Ucrania podrían tener efectos positivos a largo plazo, cree Blanco: "Los altos precios de la electricidad nos afectan en el corto plazo por el lado de los costes, pero hacen que los proyectos sean más atractivos y rentables".
Actualmente la expansión de la energía eólica está, sobre todo, fracasando por las licencias de obras en el caso de Alemania donde la densidad de población es más alta que en España y muchos municipios se resisten a la construcción de nuevos parques. Además, nadie quiere sacrificar bosques por molinos, ni siquiera en favor de la lucha contra el cambio climático. Según la Plataforma de Energías Renovables en Alemania, la iniciativa de energía eólica del nuevo gobierno con un ministro de economía de los Verdes no está cobrando impulso. “No hay avances en energía eólica en el país”, criticó el titular de la organización paraguas de la industria, Franz Pöter.
En los primeros tres meses de este año, solo se construyeron tres nuevas turbinas eólicas en Baden-Württemberg, dónde gobiernan también los Verdes. Pero para lograr los objetivos climáticos del país, se requerirá un promedio de 100 nuevas turbinas eólicas por año para 2030, dijo Pöter. La expansión de la energía eólica marina debe acelerarse según su entender. Está prevista una capacidad instalada de aerogeneradores marinos de al menos 30 gigavatios para 2030 y de al menos 40 gigavatios para 2035. En 2045, se deberían generar al menos 70 gigavatios en Alemania de esta manera. Por ello el gabinete ha decidido modificar la ley de energía eólica marina de la que ya se aprovecha también Iberdrola, cuyo proceso de aprobación de planificación para “Baltic Eagle” está completado. Son 50 aerogeneradores, una potencia de 9,5 MW cada uno, que estarán operativos para 2024. Con un total de 475 MW, el 50 por ciento de los hogares privados en Mecklemburgo-Pomerania Occidental teóricamente podrían recibir energía sostenible de esta manera. Tras el parque eólico “Wiking” de 350 MW de potencia, “Baltic Eagle” será el segundo parque eólico de la compañía española en el mar Báltico alemán.
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