La escalada alcista ininterrumpida de los últimos cuatro años unida a la incertidumbre política que ha asolado a Barcelona tras el 1-O han agotado el margen de subida de las zonas más exclusivas de Barcelona. Un fin del ciclo alcista que parece haber beneficiado a las zonas periféricas, tradicionalmente demandadas por el comprador nacional. Según […]
NacionalDirigentes Digital
| 23 oct 2018
La escalada alcista ininterrumpida de los últimos cuatro años unida a la incertidumbre política que ha asolado a Barcelona tras el 1-O han agotado el margen de subida de las zonas más exclusivas de Barcelona. Un fin del ciclo alcista que parece haber beneficiado a las zonas periféricas, tradicionalmente demandadas por el comprador nacional.
Según la inmobiliaria dedicada al segmento del lujo Engel & Völkers, por regla general, las zonas premium suelen marcar la tendencia del mercado inmobiliario y, una vez que dejan de ofrecer recorrido, el incremento de costes se traslada a barrios o municipios situados a las afueras de las grandes capitales.
En este sentido, destacan las zonas de Vallés Occidental, donde el precio de los inmuebles se ha incrementado un 16%, hasta los 569.000 euros, mientras que en Baix Llobregat la vivienda de alto standing ha experimentado un repunte del 8%, hasta los 475.000 euros. En ambos casos, el período medio entre el inicio de la comercialización y la escritura de compraventa oscila entre los siete u ocho meses.
“Antes del 1-O alquilábamos bastantes propiedades en el entorno de los 3.000 euros mensuales, sobre todo a extranjeros”, señala el director general de Engel & Völkers Barcelona, Oriol Canal, quien señala que si bien ahora alquilan más viviendas, su precio se ha reducido hasta los 1.500 euros. De este modo, el límite del alquiler oscila en una horquilla de entre los 1.500 y los 2.000 euros. Entre las causas a las que se atribuye este descenso se encuentra la caída de la demanda internacional.
En esta línea, desde la firma alemana también han detectado una moderación en la venta dentro del segmento de obra nueva con un precio que alcanza los 6.000 euros el metro cuadrado.
“Este descenso de la demanda, unido a una oferta estable -incluso algo mayor después de muchos años de importantes subidas de precios- ha eliminado el gran desequilibrio existente en años anteriores en las zonas más prime”, subraya el director de la división de alquileres de Engel & Völkers Barcelona, Albert González, quien remarca que, en cualquier caso, se trata de un ajuste en las rentas del alquiler deseable en el mercado.