Tener un empleo no siempre garantiza condiciones de vida decentes. Con esta frase la Organización Mundial del Trabajo (OIT) sintetiza la situación del mercado laboral actual. En el informe ‘Perspectivas sociales y del empleo en el mundo: Tendencias 2019’ recoge que, de las 3.300 millones de personas empleadas en todo el planeta, la mayoría no […]
NacionalDirigentes Digital
| 14 feb 2019
Tener un empleo no siempre garantiza condiciones de vida decentes. Con esta frase la Organización Mundial del Trabajo (OIT) sintetiza la situación del mercado laboral actual. En el informe ‘Perspectivas sociales y del empleo en el mundo: Tendencias 2019’ recoge que, de las 3.300 millones de personas empleadas en todo el planeta, la mayoría no goza de un nivel suficiente de bienestar económico.
“El avance de la reducción del desempleo a nivel mundial no se ve reflejado en una mejora de la calidad del trabajo”, añaden en el estudio, en el que se hace referencia a la persistencia de déficits del trabajo decente establecido en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
El trabajo remunerado continúa siendo la principal fuente de ingresos de todos los hogares del mundo. Una situación que conduce a que, en ocasiones, los trabajadores se vean obligados a aceptar puestos de trabajo “carentes de atractivo, informales y mal remunerados”.
Según datos de la OIT, alrededor de 700 millones de personas viven en situación de pobreza extrema o moderada a pesar de tener un empleo y unos 2.000 millones de personas cuentan con un empleo informal, el equivalente al 61% de la población mundial.
En este sentido, dentro de Europa, el estudio hace hincapié en algunos países como Bélgica, Italia, Finlandia y España donde los contratos de trabajo iguales o inferiores a seis meses de duración representaron más de la mitad del empleo temporal en 2017. Una cifra muy superior a la de Alemania, donde se situó en el 15%.
En cambio, el peso de los contratos temporales cuya duración alcanza al menos los dos años, es más habitual en Alemania, Austria o Dinamarca que en Francia, Portugal y España, donde se sitúa en el 10%.
Precisamente el estudio hace hincapié en España, país donde la tasa total de contratos temporales alcanzó el 26,8% en 2017, la cifra más alta desde el año 2008 y cerca de un 85% de los trabajadores que accede a un empleo temporal lo hace porque no tiene acceso al tiempo completo.