El sector de las bebidas espirituosas, que engloba a todas aquellas bebidas alcohólicas provenientes de un proceso de destilación, representa ya el 0,17% del PIB español. Nuestro país cuenta con 3.800 centros de producción, de los cuales ocho de cada diez son pymes y empresas familiares, tal y como se desprende de un informe elaborado […]
NacionalDirigentes Digital
| 07 mar 2019
El sector de las bebidas espirituosas, que engloba a todas aquellas bebidas alcohólicas provenientes de un proceso de destilación, representa ya el 0,17% del PIB español. Nuestro país cuenta con 3.800 centros de producción, de los cuales ocho de cada diez son pymes y empresas familiares, tal y como se desprende de un informe elaborado por la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE).
En total se comercializan 215 millones de litros en nuestro país. Tanto la hostelería como los restaurantes aumentaron sus ventas de bebidas destiladas en 2018, y es que más del 60% del consumo de bebidas alcohólicas se realiza fuera del hogar. Todo ello dentro de un marco de “moderación y responsabilidad”, según cuentan desde el sector.
Bebidas como el anís, licor y ponche han vivido un aumento de su consumo en el último año. No obstante, el mercado exterior cada vez es más importante. De hecho, las exportaciones crecieron un 4% respecto al año anterior, consiguiendo ser una de las principales fortalezas del sector en términos de producción total -un 40%-.
Los principales destinos de exportación fueron Filipinas, Alemania, México y Francia. El Gin se lleva la mejor cifra, con un aumento de más del 30% en las ventas al exterior. “Nuestro sector es positivo, tenemos productos de gran calidad reconocidos por los consumidores dentro y fuera de nuestra frontera”, cuenta el director de FEBE, Bosco Torremocha.
Galicia es la principal productora de este tipo de bebidas, con datos que se encuentran muy por encima del resto de comunidades autónomas: 3.565 centros de producción, un 93% del total. Le siguen Andalucía y Cataluña, con 69 y 38 respectivamente.