Mientras que España está siendo devorada por la tercera ola de la pandemia, al otro lado del planeta, Nueva Zelanda (Oceanía) destaca por todo lo contrario. Es más, recientemente ha sido reconocido por contar con la mejor ‘Marca País’ a nivel mundial en los Country Brand Awards, al obtener una nota de 8,09 sobre 10. […]
NacionalDirigentes Digital
| 15 ene 2021
Mientras que España está siendo devorada por la tercera ola de la pandemia, al otro lado del planeta, Nueva Zelanda (Oceanía) destaca por todo lo contrario. Es más, recientemente ha sido reconocido por contar con la mejor ‘Marca País’ a nivel mundial en los Country Brand Awards, al obtener una nota de 8,09 sobre 10.
La capacidad de los países a la hora de promocionarse como destino turístico, así como su potencial para atraer talento internacional y fomentar exportaciones e inversión extranjera, son los ejes que evalúa de forma independiente el jurado de esta organización y bajo los que se construye una ‘Marca País’.
Con la irrupción del coronavirus en el mundo, a los anteriores parámetros se ha sumado uno nuevo: la gestión de la COVID-19, que ha tenido un alto impacto en la reputación de los países. Es más, este factor ha influido “de forma transversal en todos los ejes, desde el económico al turístico, pasando por la capacidad de atraer inversión extranjera”, expresa en una entrevista a DIRIGENTES el CEO y fundador de MARCO, Didier Lagae, quien además preside el jurado de los Country Brand Awards.
El coronavirus ha puesto a prueba al mundo entero y cada territorio ha reaccionado de una manera diferente a este objetivo común. No obstante, Lagae valora que “la gestión de la pandemia ha sido clave, no solo por sus efectos internos en cada país, sino también por su proyección y referencia frente a otras economías, sociedades y formas de gestión”. Grosso modo, explica que son tres los criterios que han llevado a Nueva Zelanda a tener la mejor ‘Marca País’: sanitarios, políticos y de comunicación.
Desde el punto de vista sanitario, su ubicación y condición de isla, junto a las tempranas y estrictas medidas impuestas por el Gobierno de su primera ministra, Jacinda Ardern, permitieron frenar el avance del virus, incluso, redujeron la mortalidad del país en 2020. “Fueron el centro de atención a nivel internacional gracias a su respuesta pronta y efectiva. Y este es, quizás, el punto más brillante de todos, el de saber gestionar y proyectar eficazmente su ‘Marca País’, reforzándola incluso en tiempos de crisis”, argumenta Lagae. El manejo de la crisis sanitaria favoreció un levantamiento temprano de las restricciones, lo que protegió su “marca turística” y, consiguientemente, su impacto económico (el PIB cayó un 7,2% en 2020) y social.
Tras Nueva Zelanda se encuentran Singapur y Corea del Sur, en segunda y tercera posición, respectivamente. Estos resultados globales coinciden por su división por continente: Asia, Oriente Medio y Oceanía. En lo que atañe a América, Canadá es la vencedora, seguida de Colombia y Chile, mientras que en África solo consigue aprobar Marruecos, que ocupa la primera posición. Poniendo el foco en Europa, el jurado ha declarado como ganadora a Alemania por su rápida respuesta a la crisis sanitaria. Al país germano le siguen Portugal y Finlandia.
En lo que respecta a España, uno de los países más golpeados en términos económicos y sanitarios a escala global, no solo suspende en la gestión de la pandemia (4,79 puntos), sino que además se encuentra a la cola de Europa, ubicándose en el puesto número diez, de los trece países que han sido analizados. Solo supera a Reino Unido, Hungría y Rusia.
Las diferencias entre España y Nueva Zelanda son notables. Por un lado, el primero se caracteriza por la falta de previsión, medidas tardías y ausencia de estrategia definida, lo que ha tenido “graves” consecuencias desde el inicio de la crisis. Todo ello ha supuesto una falta de confianza y transparencia, que se ha transmitido a las autoridades locales, regionales y, finalmente, a los ciudadanos”. Por su parte, el país con capital en Wellington supo hacer frente a todos los efectos negativos de la pandemia. “Nueva Zelanda ha sabido atraer inversión por sus grandes atractivos: una economía amigable, bajos niveles de corrupción, una buena protección de los derechos de propiedad, altos estándares de calidad vida, estabilidad política y una ventajosa política fiscal”, expresa.
Para que España pueda remontar, el CEO y fundador de MARCO, insiste en que es clave una correcta estrategia de comunicación que englobe los diferentes ejes que componen la imagen de ‘Marca País’ y transmitan un mensaje de seguridad y adaptación a la nueva realidad sanitaria.