Madrid puede convertirse en el último destino español en introducir la tasa turística, ya que la exministra de Turismo y candidata a la alcaldía de la capital, Reyes Maroto, así lo ha propuesto. Maroto ha planteado la iniciativa este fin de semana durante un desayuno informativo organizado por el Club Siglo XXI. La candidata del […]
NacionalDirigentes Digital
| 20 abr 2023
Madrid puede convertirse en el último destino español en introducir la tasa turística, ya que la exministra de Turismo y candidata a la alcaldía de la capital, Reyes Maroto, así lo ha propuesto.
Maroto ha planteado la iniciativa este fin de semana durante un desayuno informativo organizado por el Club Siglo XXI. La candidata del PSOE no vislumbra esta posible tasa con afanes recaudatorios, sino que alega que el impuesto podría revertir en el sector. La exministra no anunció en su comparecencia el monto que planean cobrar a los visitantes si se llega a implementar la medida.
No se trata de la primera vez que un cargo público plantea una tasa turística para Madrid: el equipo de Manuela Carmena ya lo planteó en 2015 y 2018, aunque la medida nunca se introdujo. Pese a que la capital no cobra un gravamen extra a los turistas, hay otras zonas del país que también sufren el problema de la masificación turística donde ya se aplica desde hace años.
En realidad, la tasa se aplica en toda Cataluña, pero Barcelona aplica un recargo adicional. La Ciudad Condal es la más visitada de España y desde 2012 requiere que los visitantes paguen una tarifa extra. Esta tasa que cobra Barcelona y que se ha actualizado el 1 de abril, varía según el tipo de alojamiento que el turista escoja y se planteó como una medida enfocada a aliviar el exceso de turismo.
Actualmente, aquellos que se hospedan en viviendas de uso turístico deben pagar una tarifa de cinco euros por cada noche. De estos, 2,25 van a parar a las arcas regionales y el resto a las municipales. En cambio, los que se alojan en hoteles deben pagar un precio más elevado. Si este es de cinco estrellas, abonan una tarifa de 6,25 euros por noche (la Generalitat se queda con 3,5 euros y la ciudad lo restante), mientras si es de cuatro, se abonarán 4,45 euros (1,7 euros para Cataluña y 2,75 para Barcelona).
Asimismo, los pasajeros de cruceros que pasan más de 12 horas en Barcelona también deben pagar una tasa de dos euros a la región y 2,75 a la ciudad. Por último, los cruceristas que solo permanezcan unas horas en la capital catalana pagarán algo más: 5,75 euros, de los que el Ayuntamiento se queda con 2,75.
El archipiélago mediterráneo cobra una tasa desde el año 2016 a todos los visitantes mayores de 16 años. Esta se implementó para hacer del turismo una industria más sostenible, ya que el dinero se destina a proteger y mantener los recursos naturales regionales. La cantidad a pagar va desde un euro hasta cuatro por cada noche que el turista pase en esta Comunidad Autónoma:
Los datos facilitados por las autoridades muestran que se recaudarán alrededor de 12 millones de euros al año como consecuencia del impuesto turístico.
La región levantina es la última en anunciar una tasa turística, que empezará a aplicarla en diciembre de este año a todos los viajeros que se hospeden en la región y serán los ayuntamientos los que decidan si aplican el gravamen. Sin embargo, la cantidad a abonar será menor que en los dos anteriores casos: oscilará entre los 50 céntimos y los dos euros por noche. Para ello, se han diferenciado los distintos tipos de alojamiento en categorías.