Desde principio del año pasado, la economía española comenzó a crear empleo neto, más de 400.000 puestos de trabajo. El eterno debate es si se está creando de calidad. El Banco de España ha analizado la última EPA del primer trimestre que ofreció sensaciones encontradas. Por un lado, se registró el mejor periodo desde 2005 al bajar el número de parados, pero la economía destruyó 114.300 empleos y la tasa de desempleo volvió a repuntar.
El Banco de España ofrece en su boletín económico una lectura positiva de los datos de la encuesta. "El empleo siguió mostrando un comportamiento favorable en los tres primeros meses de 2015", indica, "al arrojar un aumento intertrimestral de la ocupación del 0,7%, en términos desestacionalizados, y en tasa interanual, el aumento fue del 3%, cinco décimas más que en el trimestre precedente". Además, apunta que las cifras de la Seguridad Social que en marzo subió un 0,4%, respecto a febrero, y un 1% en el conjunto del primer trimestre.
El análisis del supervisor bancario, ha analizado también cómo se ha producido esta mejora por tipo de contrato. El Banco de España detalla que los contratos indefinidos crecieron un 2,7%, al alcanzar una cifra de 25.300, pero subraya que "no obstante, se mantuvo el mayor dinamismo de la contratación temporal, con esta evolución, la ratio de temporalidad se situó en el 23,6%, cinco décimas por encima del nivel del mismo período de 2014".
Según los indicadores económicos recopilados por el Banco de España, en el tipo de contrato temporal se comenzó a crear empleo a partir del último trimestre de 2013, mientras que los contratos indefinidos empezaron a tener un saldo positivo a partir del segundo trimestre de 2014. Durante el año pasado, los contratos temporales casi duplicaron a los indefinidos.
Además, recalca la evolución según la duración de la jornada, "los ocupados a jornada completa crecieron algo menos que aquellos que tienen un contrato a tiempo parcial, con lo que la ratio de parcialidad se situó en el 16,3 %". El empleo a tiempo completo bajó en el primer trimestre del año en 130.600 personas, mientras que el número de ocupados a tiempo parcial se incrementa en 16.300. El porcentaje de personas que trabaja a tiempo parcial aumenta dos décimas, hasta el 16,25%. Por primera vez en 2014, el ratio de parcialidad se situó en el 17%.
Según el Eurostat, casi uno de cada diez trabajadores españoles tiene trabajo a tiempo parcial, el 9,1% del total. Se trata de la tasa más alta de los países de la Unión Europea, solo por detrás de Grecia y Chipre. Según la EPA, hay 2,8 millones de trabajadores se encuentran en esta situación. El 57% de ellos querrían trabajar más horas.
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