El informe del FMI es preliminar hasta que la Junta Ejecutiva ofrezca sus conclusiones finales, algo que se producirá antes de que se celebre el referéndum el 23 de junio. Pero las consideraciones del organismo envían una fuerte carga política a favor de la permanencia del Reino Unido en el seno de la Unión Europea. Sabiendo el impacto que va a provocar el informe la directora gerente, Christine Lagarde, casi se disculpó por la publicación del informe, "no hacemos política, sólo hacemos nuestro trabajo y aportar datos para que la gente opine".
El documento es demoledor en cuanto a las consecuencias. El escenario base del fondo en shock en varios planos de la economía y de las finanzas. La salida de la Unión Europea provocará el crack de la Bolsa y una caída en picado del mercado inmobiliario londinense, detalla el informe, además de empujar a la economía a una nueva recesión, tal como advirtió hace dos días el Banco de Inglaterra.
El FMI es claro al afirmar que la única forma de garantizar un crecimiento sostenible por encima del 2% es permanecer dentro de los 27. El organismo dibuja un horizonte complicado en política internacional durante años al romperse los acuerdos comerciales con los miembros de la Unión Europea. Pone el acento que más de 60 tratados internacionales que tiene Reino Unido con terceros fuera de Europa se han realizado a través de acuerdos europeos.
Además, en uno de sus puntos subraya que la City londinense perderá su capacidad de influencia en el contexto internacional, dejando de ser uno de los principales centros financieros del mundo.
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