La Secretaría de Hacienda de México lleva asignados unos 303 millones de euros (al cambio del 26 de octubre) para apoyos parciales inmediatos tras los seísmos del mes pasado, además de haber recibido más de 122 toneladas de alimentos, 512 brigadistas y 21 perros de rescate provenientes de 24 países. Así consta en el capítulo “Fuerza México”, del Portal Transparencia Presupuestaria, la plataforma de datos abiertos en la que el Gobierno publica “qué, cómo y en dónde se gastan los recursos federales destinados a la población afectada y a la reconstrucción y rehabilitación de infraestructuras”. Cómo se atiende el desastre De acuerdo con el portal, la atención del Gobierno sigue cuatro etapas: 1) apoyos de emergencia (aguas, despensas, etc); 2) apoyos parciales inmediatos (restablecimiento de comunicaciones y servicios básicos y limpieza de escombros); 3) evaluación de daños (cuantificación y georeferenciación) y 4) reconstrucción. Los 303 millones de euros corresponden a la segunda fase del plan y se destinaron a los nueve puntos geográficos más afectados. Las partidas mayores fueron para los estados de Oaxaca y Chiapas (108,6 y 74,3 millones de euros, respectivamente), principalmente para reconstruir carreteras, viviendas y monumentos arqueológicos. Ciudad de México recibió 29,6 millones de euros y el Estado de México, donde se encuentra la capital, 17 millones. En el apartado que contabiliza ayuda oficial en especie y apoyo técnico otorgado por otros países y organizaciones, España aparece con el envío de 54 brigadistas de búsqueda y 4 perros de rescate. Chile envió 3072 casas de campaña, Ecuador 13 toneladas de alimentos y Rusia 24,5 toneladas de carne, entre otros envíos de las 26 naciones que movilizaron su solidaridad. El coste económico México registró seísmos los días 7 y 19 de septiembre. El primero fue de 8,1 grados y el segundo de 7,1. Aunque no hay una evaluación oficial total de los daños, los especialistas estiman que el coste de la reconstrucción llegará a unos 2.000 millones de euros. Ese gasto le restará dos puntos porcentuales al crecimiento de su PIB en 2017, ha calculado el Bank of America Merril Lynch. Antes de los terremotos, el Presupuesto 2018 (presentado la primera semana de septiembre) era de 251.000 millones de euros. Tras los seísmos, las cuentas incorporaron dos ajustes: un tipo de cambio de 18,4 pesos por dólar y un precio del petróleo de 48,5 dólares por barril, con lo cual el gasto se eleva en aproximadamente 1.900 millones de euros. Ambos valores son más altos de lo que pronosticaba el Gobierno en su cálculo inicial (18,1 y 4,7 respectivamente), lo que ha generado polémicas parlamentarias y demoras para su aprobación, que tiene como plazo final el último día de este mes.
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