El Nikkei se ha desplomado esta madrugada más de un 2% y sufre su mayor caída desde abril del año pasado, tras publicarse un aumento del 0,6% en los ingresos laborales, frente al 2,1% esperado y a la caída del 2,5% anterior. Un débil dato que incrementa los riesgos deflacionistas y "da la puntilla" a unos inversores que no consiguen recuperar la calma ante las turbulencias desatadas por las dudas sobre el crecimiento de China y por la volatilidad de su mercado.
El gigante asiático será el gran protagonista de la reunión del G20 que comienza este viernes en Ankara (Turquía). Encuentro del que se esperan declaraciones "tranquilizadoras" por parte de sus autoridades y también sobre las perspectivas globales.
"Pero, si quieres que les diga la verdad, la mayoría del mercado tiene una referencia a considerar: la Fed", afirma José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España. Y para anticipar que hará en su reunión de mediados de mes, será clave analizar con lupa el Informe de Empleo de agosto.
La economía estadounidense creó 173.000 puestos de trabajo (frente a los 220.000 esperados), la tasa de paró se redujo hasta el 5,1% (por encima del 5,2% previsto) y los salarios subieron un 2,2% en los últimos doce meses (se estimaba un repunte del 2%). Este experto considera que los datos son "más positivos que negativos: fuerte crecimiento y dinamismo en el empleo. Pero, no tanto para subir los tipos a muy corto plazo si hay otros factores que recomiendan cautela".
Mientras la autoridad monetaria norteamericana "duda", el BCE ha reiterado su compromiso con las medidas acomodaticias y, tal y como indicaba el jueves su presidente, Mario Draghi, tras mantener los tipos en mínimos y rebajar las previsiones de inflación y crecimiento, están listos para actuar cuando sea necesario.
Por otra parte, el banquero italiano reconoció que "la moneda es muy importante para los objetivos de crecimiento e inflación, pero no hay un objetivo concreto del euro". La moneda única se ha debilitado ante su "promesa" y cotiza en niveles de 1,11. Técnicamente, el soporte a vigilar estaría en los 1,10 dólares, aunque el principal reto sería romper los 1,08. Por arriba, la primera resistencia se encuentra en los 1,127.
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