Esta es la séptima jornada consecutiva de avances para el selectivo español, demostrando la confianza de los inversores en que las negociaciones entre Grecia y sus acreedores lleven por fin a buen puerto. El indicador no veía estos niveles desde el pasado mes de mayo. Y el avance cobra aún mayores dimensiones si se tiene en cuenta que, hace solo una semana, el Ibex estaba en mínimos de febrero. En solo siete sesiones, el avance es superior al 11%.
A primera hora de esta madrugada, los diputados helenos daban luz verde a la modificación de las pensiones y a la subida del IVA con el voto en contra de 32 miembros del Gobierno de Syriza, entre ellos, el exministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, y seis abstenciones.
La primera ronda de medias está "vista para sentencia" y ahora Bruselas debe cumplir con su parte e implementar el crédito puente de 7.000 millones de euros necesario para que Atenas haga frente a sus obligaciones con el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). En principio, se espera que se empleen fondos del EFSM, pero los participantes "no euro", como Reino Unido, tienen reticencias, por lo que se está intentando establecer un mecanismo de garantías.
Asimismo, los parlamentos de otros países, especialmente Alemania y Finlandia, tienen que aprobar el posible tercer rescate entre este jueves y el viernes. En ambos casos, hay una fuerte corriente que se opone al mismo y, de hecho, desde la república germana no cesan de llegar insinuaciones sobre su preferencia respecto al Grexit.
Para Link Securities, el mayor problema, "y es algo que debería preocupar a los socios y acreedores de Grecia, es que dentro del Gobierno del país, empezando por su primer ministro, Alexis Tsipras, y terminando por su actual ministro de Finanzas, Tsakalotos, no creen en el programa de rescate, por lo que tenemos dudas de que lo terminen implementando en los términos establecidos, algo que no sería nuevo en este país, lo que dificultará que sirva para algo".
Así, estos expertos concluyen que Atenas "seguirá atrayendo gran parte de la atención de los inversores en el corto plazo, convirtiéndose en un lastre que limitará las alzas en los mercados de valores de la región a pesar del ‘optimismo’ generalizado actual".
En el mismo tono prudente se muestra Manuel Arroyo, Director de Estrategia de JP Morgan AM España y Portugal, que asegura que aunque los pasos alcanzados en los últimos días son muy positivos para el mercado, aún no se puede descartar ningún escenario. Para el experto, el programa de rescate tal y como está planteado, "no va a solucionar los problemas de Grecia". Y se suma a quien urge a u proceso de reducción de la carga de deuda o una quita. Si no, considera que "podríamos ver un cuarto programa de rescate o aumente la posibilidad de una salida del país del euro".
A pesar de la prudencia, la fiesta se ha extendido también al mercado de deuda, con la prima de riesgo cayendo hasta los 120 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años por debajo del 2%. Por su parte, el Tesoro español ha colocado 6.400 millones de euros en deuda a largo plazo (vencimientos a tres, diez, 15 y 26 años) frente al objetivo de entre 5.500 y 6.500 millones que se había marcado inicialmente como objetivo. La reducción de las tensiones derivada del principio de acuerdo en Grecia vuelve a dejarse notar en una caída de los costes, especialmente en la deuda a tres años que se reducen a la mitad, aunque la demanda se debilita ligeramente.
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