"Parece que muchos ahorradores todavía no se han dado cuenta del drástico cambio que ha supuesto la política de tipos de interés bajos del Banco Central Europeo para su patrimonio personal", explica Carsten Roemheld, estratega de mercados de capitales en Fidelity International. A su juicio, los intereses que pagan las cuentas de ahorro, los depósitos a la vista y los depósitos a plazo fijo son minúsculos, lo que se traduce en rentabilidades negativas cuando se descuentan los gastos y la inflación.
El experto sí considera que el ahorrador debe contar con unas reservas de liquidez adecuadas, para lo que sí recomienda los depósitos a la vista. Sin embargo, insiste en que "este este tipo de inversión no es adecuada para constituir un patrimonio a largo plazo".
Las cifras que maneja la entidad lo dejan claro. "Un ahorrador que hubiera metido 100 euros en un depósito a la vista todos los meses durante los últimos 15 años, habría conseguido una rentabilidad anual del 0,5%, según el tipo medio de los depósitos a la vista del Banco Central Europeo". Eso significa que los 18.000 euros totales ingresados como ahorro mensual se habrían convertido en 18.687 euros.
Siempre teniendo en cuenta que para e largo plazo es imprescindible mantener la cabeza fría en periodos de turbulencias, los cálculos de la entidad evidencian cómo si estos mismos ahorradores hubieran invertido el dinero en los grandes valores de la bolsa europea, ese ahorro se habría convertido en un total de 28.552 euros, mientras que una inversión en los grandes valores cotizados españoles se habría traducido en un total de 24.726 euros.
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