Según el Instituto Nacional de Estadística, la economía española no perdió el paso de crecimiento, como indicaban varios indicadores y algunas advertencias de expertos y empresarios, al crecer un 0,8% hasta marzo. El propio Banco de España alertó a principio de mes que el PIB se había dejado una décima, apuntando a que se debía a la inestabilidad política y a la desaceleración global.
Normalmente el dato de Estadística suele coincidir con la estimación previa del Banco de España, que publica la previsión casi con un mes de adelanto. Ambos organismos beben de las mismas fuentes económicas, pero el regulador del sistema financiero lo hace con indicadores adelantados. Fuentes cercanas al INE, aseguran que Estadística siempre está condicionada por el dato adelantado del Banco de España.
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