Los problemas de la cadena hotelera Silken llegan por vía de su principal propietario. El promotor inmobiliario Urvasco ha entrado en concurso de acreedores por no poder hacer frente a su pasivo. Tras conocerse el auto del juzgado de lo mercantil de Vitoria habrá que ver cómo se pone en marcha la gestión y ver en qué parte afecta la cadena hotelera.
Ha sido el que fuera socio de Urvasco, el fondo Carey Value Added, el que ha motivado este proceso. El fondo puso en marcha junto al promotor inmobiliario un hotel en Londres, sin embargo el proyecto fue un fracaso y Urvasco quedó con una deuda de 68,9 millones de euros.
El movimiento de renegociación de su deuda que puso en marcha Urvasco entre 2008 y 2009 finalmente no ha llegado a buen puerto. El grupo pidió en ese momento financiación en Londres, pero los bancos consideraron que no estaba en condiciones idóneas para dársela. Esto perjudicó al adelanto monetario que ya había hecho Carey, que pidió que Urvasco entrara en concurso de acreedores. Un hecho que se ha producido tras un largo litigio.
El Juzgado afirma ahora que los dos forman parte del mismo grupo y acuerda por tanto la declaración conjunta del concurso de acreedores. Además señala que en abril de 2013 el Tribunal Superior de Justicia de Londres estableció en una sentencia que este grupo debía a su acreedor Carey más el litigio surgirdo tras el proyecto fallido del hotel.
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