De enero a junio, la iniciativa liderada por la Fundación la Caixa ha contado con la colaboración de 10.467 empresas, de las que 4.149 lo han hecho por primera vez
Desarrollo de carreraG.D.
| 17 oct 2024
La discapacidad, el origen, el género, el nivel formativo, así como algunos factores de tipo socioeconómico como no tener ingresos o vivir en un entorno desfavorable, actúan como barreras de acceso al mercado laboral e impiden identificar y reconocer la motivación y el talento que tienen las personas. Para acabar con estos factores de riesgo, la Fundación la Caixa puso en marcha hace ya 18 años, en el año 2006, el programa Incorpora, cuyo objetivo es conseguir la integración sociolaboral que facilite la inclusión social de todos los ciudadanos.
A través de las entidades sociales que conforman su red, los principales perfiles a los que la iniciativa acompaña son personas con discapacidad, jóvenes en situación de riesgo de exclusión, mujeres víctimas de violencia de género, desempleados mayores de 45 años, personas privadas de libertad y personas con problemas de salud mental. De este modo, a lo largo del primer semestre de 2024 ha facilitado 22.637 puestos de trabajo. Del total de las inserciones logradas, 5.332 han sido de personas con alguna discapacidad y 17.305 de personas en riesgo o en situación de exclusión.
En este punto, el apoyo del tejido empresarial se erige como un componente clave y un agente generador de empleo capaz de promover la inclusión laboral. Así, en este periodo el programa de la Fundación la Caixa ha contado con la colaboración de 10.467 empresas, de las cuales 4.149 lo han hecho por primera vez. Un dato que demuestra el trabajo de sensibilización realizado por el personal técnico para incrementar el número de empresas que se unen al programa Incorpora para expresar su compromiso con la no discriminación y la igualdad de oportunidades, así como para crear entornos laborales cada vez más diversos e inclusivos.
En esta línea, desde la Fundación la Caixa destacan la importancia del trabajo en red que realizan las entidades sociales vinculadas al programa Incorpora junto a sus técnicos. Una estrategia colaborativa que permite aumentar las posibilidades de cubrir de forma rápida y con calidad las ofertas laborales que presentan las empresas. De este modo, los técnicos diseñan itinerarios de inserción personalizados que reconocen el potencial de los usuarios del programa y promueven su participación, logrando que se sientan protagonistas de su progreso y se cumpla uno de los objetivos esenciales del programa: que las personas en situación de vulnerabilidad mejoren su bienestar, amplíen su red social y disfruten de un proyecto de vida autónomo.
La formación para mejorar la empleabilidad también representa un pilar dentro del programa Incorpora. Por ello, de forma paralela al trabajo que realizan los técnicos, la iniciativa impulsa acciones formativas, con la implicación de las empresas, dirigidas a las personas participantes. Estas tratan de mejorar las competencias técnicas y transversales, y algunas de las más demandadas son la flexibilidad, la capacidad de relación, el trabajo en equipo y las competencias digitales, todas ellas fundamentales para el correcto desempeño laboral.
En el primer semestre de 2024, del conjunto de los 145 cursos de formación finalizados, con un total de 2.375 personas, se han conseguido 1.484 inserciones, lo que representa un 62,5% de estos participantes.
Dentro del colectivo de personas vulnerables también se encuentran perfiles emprendedores que se plantean el acceso a una actividad profesional creando un negocio propio. Para ayudarles en su desarrollo profesional, el programa Incorpora cuenta con 45 Puntos de Autoempleo desplegados por toda España, en los que profesionales especializados ofrecen un itinerario personalizado de apoyo para desarrollar un plan de negocio y analizar su viabilidad para crear la empresa.
De enero a junio de 2024, esta línea de Autoempleo ha contribuido a impulsar 877 nuevos negocios liderados por personas en riesgo de exclusión social, lo que supone un 3,5% más que el año anterior.
La diversidad, además de mejorar la cultura empresarial, impulsa la creatividad y la innovación. Por ello, desde la Fundación la Caixa consideran que las organizaciones que integran su compromiso social en la estrategia de negocio “contribuyen a crear un futuro más justo, ético y sostenible”. De hecho, las empresas participantes contribuyen al ODS 8 (“trabajo decente y crecimiento económico”) y al ODS 10 (“reducción de las desigualdades”), recogidos en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas a través de los que ayudan a crear impactos positivos para las personas y para la sociedad. Por su parte, el programa Incorpora contribuye al ODS 17 (“alianzas para lograr los objetivos”) fomentando la construcción de alianzas entre las entidades del tercer sector y las empresas colaboradoras.
En España, el número de entidades sociales que participan en este programa de la Fundación la Caixa asciende hasta las 411, mientras que la red llega hasta las 488 entidades gracias a la participación de Portugal, Marruecos, Hungría y Polonia donde también se desarrolla.