Las condiciones de financiación siguen poniéndoselo difícil al sector de las pequeñas y medianas empresas en España. Los créditos concedidos a las pymes han disminuido en un 9% en el segundo trimestre de 2023 frente al mismo periodo de 2019. Un dato acechado por el efecto inflacionista y aumentando un 5,4% interanual, alcanzando los 41.400 […]
PYMESDirigentes Digital
| 07 nov 2023
Las condiciones de financiación siguen poniéndoselo difícil al sector de las pequeñas y medianas empresas en España. Los créditos concedidos a las pymes han disminuido en un 9% en el segundo trimestre de 2023 frente al mismo periodo de 2019. Un dato acechado por el efecto inflacionista y aumentando un 5,4% interanual, alcanzando los 41.400 millones de euros, según el último ‘Informe de financiación a pymes’ presentado por la patronal Cepyme, basándose en los datos monetarios del Banco Central Europeo (BCE). Una restricción a los créditos más severa que se traduce en un 9% menos de la financiación concedida, comparado con el segundo trimestre de hace cuatro años.
El tipo de interés promedio de los nuevos préstamos otorgados a las pymes se sitúa en 4,36%, siendo la cuota más alta desde 2008. Un incremento que se refleja también en los 292 puntos base, el más elevado desde el año 2000. Datos que ponen de manifiesto su alto impacto en las opciones que se le presentan a las empresas de menor tamaño para desarrollarse y crecer en el mercado, o lo que es lo mismo, para una de los motores de riqueza fundamentales en la economía del país.
Una de las principales consecuencias es el aumento de solicitudes de préstamos, procedentes de las pymes, rechazadas por los bancos. Una tendencia que ha persistido durante cinco trimestres consecutivos, afectando directamente a estas empresas que necesitan financiación para operar y crecer.
Según los datos ofrecidos por Cepyme, dicha situación se debe a la menor liquidez existente en el mercado, así como a la corriente pesimista ante las perspectivas económicas. Las entidades financieras han elevado sus estándares de exigencia crediticia para las pymes, lo que dificulta aún más la obtención de préstamos a tasas razonables.
Los bancos han reducido su tiempo estimado para la devolución de los créditos concedidos a las pymes, alcanzando periodos inferiores a los 11 meses e igualándose a datos que no se apreciaban desde marzo de 2012. Disminución de plazos que se traduce en desafíos adicionales para la empresa española, tal y como declara Gerardo Cuerva, presidente de la patronal, que ve como el sector necesitará más tiempo para utilizar esos fondos de manera más efectiva y poder alcanzar un retorno de la inversión.
A pesar de que los tipos de interés siguen siendo los más bajos que la media de la Eurozona, las condiciones financieras siguen endureciéndose, especialmente para las empresas de pequeño y mediano tamaño. Condiciones que dificultan el acceso a la financiación y plantea obstáculos para el crecimiento y la inversión no solo de las pymes, sino de la economía general. Una situación que, según Cepyme, “no visto se ha visto en décadas”.