Siemens Gamesa ha anunciado sus cifras de resultados del tercer trimestre de su año fiscal, el que va desde abril a junio pero se inicia en octubre. La compañía ha conseguido elevar sus beneficios a los 44 millones de euros entre abril y junio. Esas cifras significan que ha conseguido más que triplicar los ingresos […]
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| 27 jul 2018
Siemens Gamesa ha anunciado sus cifras de resultados del tercer trimestre de su año fiscal, el que va desde abril a junio pero se inicia en octubre. La compañía ha conseguido elevar sus beneficios a los 44 millones de euros entre abril y junio.
Esas cifras significan que ha conseguido más que triplicar los ingresos del mismo periodo del año anterior, cuando alcanzó unas ganancias de 12 millones de euros. Así, el aumento es del 274%, a pesar de que se reducen sus ventas. No obstante, estos datos tienen que ver con el coste de las amortizaciones, que se reducen en un 34% en comparación con las del año anterior.
De esa forma, teniendo en cuenta los resultados de los dos anteriores trimestres, Siemens Gamesa cifra sus beneficios en 45 millones de euros, en un periodo marcado por los 239 millones de euros de coste de las amortizaciones.
Como se ha dicho, registra un descenso de las ventas. Durante el tercer trimestre alcanzaron los 2.135 millones, lo que representa un descenso del 21% en términos interanuales. En cuanto a la facturación de los nueve primeros meses del año fiscal, fue de 6.504 millones de euros, lo que en comparación con el mismo periodo del anterior ejercicio significa un descenso del 25%.
La empresa explica esta reducción en las cifras de ventas “por el menor volumen de ventas y la reducción de precios de las turbinas”. Aun así, saca pecho de su actividad comercial. “Mantiene su fortaleza”, según Siemens Gamesa, al alcanzar unos pedidos récord de 23.226 millones de euros, que representan una mejora del 14% con respecto al periodo abril-junio.
La compañía recalca estas cifras de pedidos que auguran unas buenas cifras futuras, así como los acuerdos para el suministro de 165 turbinas a Hornsea II, el mayor parque eólico marino del mundo hasta la fecha, y 120 MW para el primer proyecto eólico offshore en Taiwán.