¿Estamos a las puertas de una recesión?

Una de las frases que más se repiten en los análisis económicos de las últimas fechas es “final del ciclo económico”, acompañada de la palabra “ralentización”. Por eso, cabe preguntarse, después de conocer algunos datos macroeconómicos del primer trimestre, si la economía está acercándose a una recesión próxima.

¿En que fijarnos?

A finales de 2018 el volumen del comercio mundial se vio afectado y esto es un claro síntoma de desaceleración. Además, la Organización Mundial del Comercio ha advertido que en este primer trimestre de 2019 se han visto síntomas de desaceleración. «El indicador comercial de la OMC apunta a una ralentización del crecimiento del comercio en el primer trimestre de 2019», dice la organización.

“Los índices de gestores de compras (PMI) también se están deteriorando perceptiblemente. Lo que resulta sorprendente es el ligero deterioro de las cifras de Reino Unido debido a los problemas causados con su brexit, evento que ha mantenido como rehén a la política europea durante muchos meses.”, señala Volker Schmidt, gestor senior de ETHENEA Independent Investors S.A.

Otro indicador clave del futuro de los mercados es, sin duda, el nivel de rendimiento de los bonos federales alemanes y de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años. El 22 de marzo de 2019, el bono alemán a 10 años se negoció con un rendimiento negativo por primera vez desde 2016.

Donde parece menos probable que se produzca una recesión cercana es en Estados Unidos. “Cuando se trata de medir la probabilidad de una recesión en EE.UU., el Conference Board Leading Economic Index ha funcionado como un indicador fiable del crecimiento económico futuro. Este índice hace un seguimiento de diez variables económicas clave y tiende a alcanzar máximos y mínimos adelantándose al ciclo económico. Actualmente, la lectura de este índice no predice que vaya a haber una recesión inminente.”, comenta el equipo de análisis de Alger Management.

Más problemas en Europa

Si en Estados Unidos la recesión parece más lejana, en Europa hay más riesgo. Italia, Francia y Alemania son los países con más probabilidades de sufrir una recesión cercana. Aunque, dentro de los tres países hay que hacer matices. Italia y Francia presentan la peor cara con una economía endeudada en demasía y con gobiernos que no están haciendo las reformas adecuadas.

Sin embargo, la situación alemana se explica por dos motivos: la legislación germana sobre el diésel y la sequía del 2018. En primer lugar, las leyes para restringir el diésel han supuesto un duro golpe al sector automovilístico alemán, que está pidiendo más flexibilización. En segundo lugar, la sequía del pasado año obligó a que los barcos de mercancías no pudieran viajar por los principales ríos del país – en Alemania el tráfico fluvial de mercancías resulta clave – por lo que hizo que la producción y reparto de mercancías se ralentizase.

2019-05-10 09:53:08

Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *