La Reforma Energética que México inició en 2014 significó la apertura de los recursos naturales de ese país a la inversión extranjera tras un monopolio estatal de casi 80 años. La creación de un mercado multilateral sigue un plan de licitaciones por rondas según sectores. La cuarta licitación de la primera etapa, realizada en diciembre, implicó la asignación de 10 áreas de aguas profundas (presal) con recursos prospectivos por un total de 10.537 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
Dos áreas, diez bloques
Ese potencial se distribuye entre cuatro bloques del Área del Cinturón Plegado de Perdido (8.218 kilómetros cuadrados, ganados por China Offshore Oil, Total E&P México y Chevron Energía con Pemex ) y seis de la Cuenca Salina (15.616 kilómetros cuadrados, para Statoil E&P México, PC Carigali y Murphy Sur).
Para completar el cuadro, el bloque Trión (que puede proporcionar crudo ligero, sin azufre, de alto valor en el mercado) fue para la australiana BHP Billiton Petróleo, que se convierte así, mediante una inversión de 11.000 millones de dólares, en la primera socia privada de Pemex en la historia de esa petrolera estatal.
Todos estos datos explican el optimismo del Gobierno y las positivas proyecciones de consultoras privadas, que coinciden en considerar este resultado como un hito de la economía mexicana en tiempos en que la sombra de Trump había sembrado de incertidumbres la escena.
Fuerza inversora
“Ganó México”, fue la frase con la que el secretario de Energía, Joaquín Coldwell, celebró la conclusión de la ronda. “Los contratos traerán inversiones por más de 41.000 millones de dólares y 450.000 empleos directos e indirectos”, estimó el funcionario.
Las concesiones significan que el Estado mexicano obtendrá hasta un 66% de las utilidades que generen los proyectos. Ante el éxito obtenido, Coldwell anticipó la posibilidad de abrir aún más licitaciones entre 2017 y 2018, cuando concluye el mandato del actual presidente, Enrique Peña Nieto, impulsor de la Reforma Energética.
“Este resultado supera las previsiones del mercado”, dijeron por su parte los analistas de BBVA Research, que avizoran “el más fuerte impulso a la inversión y producción petrolera bajo la Reforma Energética” y estiman una inversión de hasta 52.000 millones de dólares en los próximos diez años.
El caso de Trión agrega entusiasmo también por el hecho de que podría apuntalar un primer resultado financiero positivo de Pemex en 2019. La petrolera arrastra pérdidas de 40.000 millones de dólares hasta 2015, con deudas por casi 100.000 millones.
“Los beneficios de esta política trascenderán a esta administración”, concluyó el secretario de Energía.
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