Los ponentes de la jornada han coincidido en la importancia de potenciar las energías renovables para reducir la elevada dependencia de los combustibles fósiles de la Unión. En concreto, el 72% del consumo en los países de la UE procede de fuentes fósiles. Además, los países miembros tienen que importar más de la mitad de la energía que consumen. Actualmente, trabajan en el sector de las renovables en España unas 60.000 personas, lo que convierte a España en el cuarto país por fuerza laboral en la industria. Para 2030, según Sefcovic, se crearán 100.000 empleos adicionales que aportarán 12.000 millones de euros más al PIB del país. El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha destacado el papel pionero de España en materia de renovables, aunque ha señalado que se “invirtió demasiado pronto” en ellas “pagando un precio demasiado alto”. A este respecto, Mariano Marzo, catedrático de Recursos Energéticos de la Universidad de Barcelona, ha cuestionado los progresos hacia la diversificación de fuentes de energía en Europa, que depende en gran medida de Rusia y cuyos gasoductos pasan por zonas inmersas en tensiones geopolíticas. Sefcovic ha reconocido en este aspecto la “posición dominante de GazProm”. “Queremos elegir a quién comprar energía porque pagamos bien y a tiempo”, ha declarado Sefcovic. Para 2020, la Unión de la Energía pretende que todos los países miembros cuenten con al menos un 10% de interconexión de energía para crear un mercado energético «seguro, asequible y limpio», en palabras de Sefcovic. Sin embargo, mientras algunos países ya superan el 60% de interconexión, España se sitúa en el 3% y será el único país que no alcance el objetivo para 2020. Para Javier Solana, presidente de ESADEgeo, el motivo de esta falta de interconexión en España proviene directamente de Europa. “No estamos en el mercado [europeo de energía] porque no nos han permitido estar en el mercado”, ha declarado tajante. El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha hecho un llamamiento a Europa durante la jornada para dar más flexibilidad a España mientras consigue alcanzar los objetivos de interconexión. Para él, actualmente los presupuestos públicos necesitan ser más flexibles a la hora de apostar por la eficiencia en los edificios públicos. Nadal ha opinado que no debe tratarse a los edificios sostenibles como a un proyecto de infraestructuras “normal”, sino que “son proyectos que se pagan solos» en los que «se puede calcular el retorno económico”.
hemeroteca