Con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, se han consolidado los cambios en la renta de este año. Además, este año se empieza a aplicar el MEI, o Mecanismo de Equidad Intergeneracional de las pensiones, un nuevo tributo que se impone sobre la cotización de los trabajadores y que recae, mayoritariamente, a cargo […]
FiscalidadDirigentes Digital
| 13 dic 2022
Con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, se han consolidado los cambios en la renta de este año. Además, este año se empieza a aplicar el MEI, o Mecanismo de Equidad Intergeneracional de las pensiones, un nuevo tributo que se impone sobre la cotización de los trabajadores y que recae, mayoritariamente, a cargo del empleador.
Una de las principales novedades va enfocada a las rentas más bajas. La reducción, que hasta este año solo afectaba a aquellos que ganaban entre 15.000 y 18.000 euros, se ha ampliado hasta los 21.000 euros. Según cálculos de Hacienda, esto supondrá que la mitad de los trabajadores noten la rebaja en el bolsillo.
Además, el mínimo de tributación aumenta de 14.000 a 15.000 euros anuales. Con este aumento de la cantidad exenta de declarar, el Gobierno pretende cubrir a los perceptores del salario mínimo tras el aumento que se espera para enero, que se calcula que podrá superar los 1050 euros mensuales en 14 pagas, o 14.700 anuales. En el caso de los asalariados con dos hijos que presenten la declaración conjunta, el mínimo de tributación pasa de 18.000 a 19.000 euros anuales
Para evitar que las rentas que se encuentran justo por encima de esos 21.000 euros pierdan poder adquisitivo, el Gobierno ha aprobado un ajuste técnico para que aquellos que tengan un sueldo bruto de entre 22.000 y 32.500 obtendrán un plus gradual de hasta 1.000 euros (cuanto más se acerque al mínimo, mayor es la bonificación). Así, según el propio Ejecutivo, se evitan los “errores de saltos” producidos por la extensión de la reducción a las rentas más bajas.
Por otro lado, se incrementan los impuestos a las rentas del capital. Aquellas que oscilen entre los 200.000 y los 300.000 euros, verán el gravamen un punto más alto (27%) y, a partir de los 300.000, subirán dos puntos (28%).
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional de las pensiones (MEI) es un nuevo impuesto que entra en vigor el 1 de enero de 2023. Se trata de un nuevo tributo de carácter temporal ideado para reforzar el sistema de pensiones (se prevé con el mismo recaudar 22,000 millones en las próximas dos décadas). Se trata de un gravamen adicional del 0,6% aplicado a las cotizaciones de los trabajadores y se sufragará entre empresarios y trabajadores. Los primeros se harán cargo del 0,5%, mientras que los empleados sufragarán el 0,1% restante.
Para un trabajador con un sueldo bruto de 2.500 euros, el aumento será tan solo de 15 euros mensuales: 12,2 euros que abona la empresa, y 2,5 el trabajador. En el caso de los autónomos, el aumento será de cinco euros mensuales. Con esta nueva tasa, el Gobierno prevé reforzar las jubilaciones que llegarán entre 2030 y 2040, cuando la mayoría de la generación del baby boom se jubile.
El Gobierno estima que el MEI será clave para las jubilaciones que se producirán entre el 2030 y el 2040, donde el grueso de la generación del baby boom se retirará. A partir de entonces, el impuesto podría dejar de aplicarse.