El bombardeo ha tenido lugar en las zonas que los turcos habían arrebatado a los insurgentes sirios en la región norte de Alepo, donde se incluía la base aérea de Menagh, y que la milicia Kurda de Siria YPG había decidido ocupar. El territorio conquistado por Turquía fue invadido por la milicia y el sábado […]
Dirigentes Digital
| 15 feb 2016
El bombardeo ha tenido lugar en las zonas que los turcos habían arrebatado a los insurgentes sirios en la región norte de Alepo, donde se incluía la base aérea de Menagh, y que la milicia Kurda de Siria YPG había decidido ocupar.
El territorio conquistado por Turquía fue invadido por la milicia y el sábado fueron instados a abandonarlo pero, al encontrarse con la negativa de los kurdos, Turquía inició sus medidas disuasorias que consistieron en bombardear durante dos días la zona en cuestión.
La decisión radical de bombardear a las milicias tras un leve intento de negociación se debe a la alarma que hay instaurada en Turquía por la expansión de la influencia kurda en el norte de Siria desde el inicio del conflicto en el año 2011. El YPG, quien fuera un aliado de los Estados Unidos en la campaña contra el Estado Islámico en Siria, controla prácticamente la totalidad de la frontera norte del país con Turquía.
El primer ministro turco se ha escudado diciendo que el bombardeo tuvo lugar bajo las normas de combate contra fuerzas que representaban una amenaza en Azaz y alrededores, según informa Reuters.
En sus declaraciones también exigió que la base de Menagh fuera evacuada y dijo que había hablado con Joe Biden, vicepresidente de Estados Unidos, para manifestarle su posición frente a la milicia, a la que califica de una extensión del PKK, Partido de los Trabajadores del Kurdistán, y una amenaza directa para Turquía.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el bombardeo se produjo de madrugada y duró toda la noche, intensificándose alrededor de las 2 de la mañana, hora local.
La alianza kurda Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) también se encontraba luchando contra insurgentes sirios cerca de la ciudad de Tel Rifaat en la provincia de Alepo, según el Observatorio y, uno de los grupos armados del FDS, Jaysh al-Thuwar, advirtió a Turquía antes de que llevara a cabo cualquier acción hostil intentando disuadirles de ello, diciendo: "Si tiene objetivos en nuestra querida nación, defenderemos nuestra tierra y nuestra gente, y lo consideraremos hostil".
Mientras tanto, el ejército de Siria, respaldado por Rusia, está luchando contra los insurgentes en la frontera del país con Turquía tratando de asegurarla y sellarla.