La explosión ocurrió en el estacionamiento del parque Gulshan-e-Iqbal, a escasos metros de unos columpios para niños. Cerca de 150 personas han resultado heridas en la explosión, según Reuters. De momento nadie ha reclamado la autoría de la explosión. Pakistán, un país con armamento nuclear de 190 millones de personas, enfrenta la violencia de insurgentes […]
Dirigentes Digital
| 27 mar 2016
La explosión ocurrió en el estacionamiento del parque Gulshan-e-Iqbal, a escasos metros de unos columpios para niños. Cerca de 150 personas han resultado heridas en la explosión, según Reuters. De momento nadie ha reclamado la autoría de la explosión.
Pakistán, un país con armamento nuclear de 190 millones de personas, enfrenta la violencia de insurgentes Talibán, bandas criminales y grupos sectarios. Punyab es la provincia más grande y con mayores riquezas.
Según algunos testigos, la escena después de que el polvo ocasionado por la explosión se asentara, es dantesca con restos humanos esparcidos por el aparcamiento. El parque tenía una gran concurrencia en la tarde del domingo debido al fin de semana festivo de Pascua.
Salman Rafique, asesor de salud del gobierno provincial de Punyab, dijo que el balance arrojaba al menos 70 muertos. "La mayoría de los muertos y heridos son mujeres y niños", dijo Mustansar Feroz, superintendente de la policía de la zona en la que está localizado el parque.
Las imágenes de medios muestran a niños y mujeres llorando y gritando, y a socorristas, policía y transeúntes llevando a heridos a ambulancias y vehículos privados.
En 2014, Pakistán lanzó una ofensiva contra los talibanes y combatientes yihadistas asociados en Waziristán del Norte, buscando privarlos de las zonas de refugio desde las que lanzan ataques en Pakistán y Afganistán. Punyab ha sido tradicionalmente más pacífica que otras zonas de Pakistán.
Los opositores de Sharif lo han acusado de tolerar el extremismo a cambio de la paz en la provincia, algo que él rechaza. El año pasado, una bomba mató a un popular ministro provincial paquistaní y a otras ocho personas en un atentado que destruyó la casa del ministro en Punyab