La consultora KPMG acaba de publicar su informe CEO Outlook 2018, en el que pulsa la opinión de los consejeros delegados de las principales compañías españolas. En la edición de este año, el estudio muestra que los dirigentes empresariales confían en las posibilidades laborales que ofrece el avance tecnológico y la industria 4.0.
Así, el 68% de los CEOs consultados asegura que la robotización de la economía y la inteligencia artificial crearán más puestos de trabajo del que destruyan durante los próximos tres años. Además, cerca de un 100% de ellos están convencidos de las oportunidades que abre la transformación digital, considerándolo una oportunidad más que una amenaza. Mientras, un 56% de dirigentes empresariales encuestados por KPMG prevé incrementar su plantilla en los próximos años entre el 6% y el 10%. Dentro de los perfiles más demandados en esta nueva oleada de empleo, destaca el de científico de datos, debido a la importancia creciente de la analítica. Respecto a sus actitudes personales respecto al cambio de paradigma que supone la robotización y la inteligencia artificial, el 60% de los dirigentes se siente preparado para liderar personalmente una transformación radical de la organización, aunque dos de cada tres reconoce que ha confiado más en su instinto a la hora de encabezar ese proceso que en análisis o estudios como el de KPMG. En cuanto a los riesgos que preocupan a los consejeros delegados españoles en ese proceso de disrupción tecnológica, el informe de la consultora señala en primer lugar los factores geopolíticos, seguidos de los riesgos climáticos, mientras que los derivados de las tecnologías disruptivas y emergentes, de la reputación y de la ciberseguridad completan el top 5. Para encarar estos riesgos, KPMG señala que existe buena actitud entre los dirigentes. Un 44% de los consejeros delegados se declara preparado para afrontar un ciberataque y un 78% cree que contar con una estrategia es clave para mantener la confianza. A la vista de estos resultados, el presidente de KPMG en España, Hilario Albarracín, ha señalado que el reto actual es gestionar la formación y reconversión de los profesionales para un futuro en el que estos tengan a las máquinas como compañeras de trabajo.