El Informe Económico Anual del Gobierno alemán obvia que la nueva situación de Grecia con Syriza al frente provoque nuevas turbulencias alrededor del euro y espera una recuperación en 2015 que deje atrás el estancamiento por el que pasa la economía germana. El Ejecutivo de Angela Merkel prevé que el PIB crezca un 1,5% gracias al impulso del consumo y la caída de los precios de la energía.
El ministro alemán de Economía y Energía, Sigmar Gabriel, destaca que el país ha vuelto a una senda de crecimiento a pesar de las turbulencias geopolíticas del pasado año. Y es que Merkel da por superado el escollo que supuso el conflicto entre Rusia y Ucrania y no espera que Grecia cree una nueva fractura en el euro. Gabriel en la presentación del documento ha dicho que no teme un contagio "como pasó hace dos años" gracias a los progresos sobre la unión bancaria y las reformas estructurales en países como España, Portugal e Irlanda.
La mano derecha de Merkel no contempla un escenario donde Grecia plantee problemas, "es inimaginable una quita de la deuda helena y que Grecia no puede desvincularse de lo acordado en los rescates por el hecho de haber votado a otro gobierno". Y lanza un mensaje al ejecutivo heleno "no puede ser que lo que no se hace en Grecia, acabe teniendo que ser resuelto en los países vecinos, por empresarios y trabajadores de otros países".
Las previsiones de Alemania coinciden con las del FMI de la pasada semana, que rebajó en tres décimas en las estimaciones para 2015. "El estímulo que ofrece principalmente el fuerte incremento del gasto de los consumidores es probable que lleve a un crecimiento del PIB del 1,5%", indica Gabriel.
El informe subraya que la inversión y la innovación son la clave para aumentar la competitividad, lograr una prosperidad general sostenible y mejorar la calidad de vida de las personas tanto en Alemania como en Europa. Por ello, el Gobierno se ha fijado como objetivo "fortalecer la inversión pública y privada en Alemania y Europa".
Sobre empleo, el Gobierno espera mejorar las cifras de 2014, que supusieron 42,7 millones de personas con trabajo en el país, un dato histórico en empleo. Prevé, que esta tendencia "muy positiva" continúe en 2015 con la creación de 170.000 puestos de trabajo, hasta 42,8 millones de trabajadores.