El Banco Central Europeo (BCE) anticipó ayer algunos artículos de su Informe mensual, esperado para este jueves. En esta nota nos vamos a centrar en su valoración del mercado de commodities, al margen del crudo. Me refiero a los alimentos y metales. No es muy optimista a corto plazo la autoridad monetaria europea para la […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2015
El Banco Central Europeo (BCE) anticipó ayer algunos artículos de su Informe mensual, esperado para este jueves.
En esta nota nos vamos a centrar en su valoración del mercado de commodities, al margen del crudo. Me refiero a los alimentos y metales.
No es muy optimista a corto plazo la autoridad monetaria europea para la evolución de los precios de los alimentos. Y alude para explicarlo a tres factores: elevadas cosechas, elevados inventarios y la caída de la demanda desde China. Los mercados viven de expectativas, pero es evidente que ahora ha podido pesar más el último factor frente a los dos primeros. Consideren, además, que la caída de los precios de la energía presionan a la baja la producción (demanda al fin y a cabo) para producir biocombustibles.
Como ven, pocos argumentos a corto plazo para esperar un cambio de dirección al alza en los precios.
Tampoco parece muy optimista para la evolución en los próximos meses de los precios de los metales, mucho más sensibles (reconoce el BCE) a la evolución del ciclo. Y con una oferta rígida, que ahora está dominada por la sobrecapacidad tras una fuerte inversión en los últimos años.
¿La clave para su evolución a corto plazo? China, también las perspectivas de demanda desde las economías más intensivas en demanda como son las emergentes.
José Luis Martínez Campuzano es Estratega de Citi en España.