El partido anti-inmigración AfD ha obtenido un creciente apoyo popular debido en parte a la llegada de más de un millón de refugiados a Alemania en 2015 y cuenta ahora con escaños en ocho de las 16 parlamentos regionales en el país germano. Después de dos ataques islamistas y la matanza causada por un adolescente […]
Dirigentes Digital
| 20 ago 2016
El partido anti-inmigración AfD ha obtenido un creciente apoyo popular debido en parte a la llegada de más de un millón de refugiados a Alemania en 2015 y cuenta ahora con escaños en ocho de las 16 parlamentos regionales en el país germano. Después de dos ataques islamistas y la matanza causada por un adolescente mentalmente inestable el mes pasado, los alemanes están al límite y AfD espera convertir ese malestar en votos en Berlín y Mecklenburg-Vorpommern.
"Muchas personas se están sintiendo cada vez más inseguras. Cada ciudadano respetuoso de las leyes debería estar en posición de defenderse a sí mismo, a su familia y a sus amigos", dijo Frauke Petry al grupo de medios Funke, en una entrevista.
"Todos sabemos cuánto tiempo lleva que la policía pueda llegar a la escena, especialmente en lugares poco poblados", agregó. Famosa por sus declaraciones de alto perfil, Petry generó alboroto previamente este año cuando instó a que se le permita a la policía alemana usar armas de fuego contra los inmigrantes ilegales.
La líder de AfD rechazó los pedidos de algunos sectores para restringir los permisos de armas, argumentando que eso afectaría a los ciudadanos respetables y no a aquellos que adquieren armas en el llamado "mercado negro".
Alemania tiene una de las normas más estrictas sobre control de armas en Europa. Los propietarios de armas de fuego deben obtener una licencia, a la que acceden generalmente si tienen al menos 18 años y demuestran un motivo por el que necesitan un arma. Pero el uso de pistolas de fogueo y gas pimienta ha subido un 49 por ciento en la primera mitad de 2016, según datos oficiales.