Cuando el sistema financiero español hacía aguas, con la precipitación de fusiones de la extintas cajas de ahorros y posteriores salidas a bolsa, y se cifraba el rescate bancario en 100.000 millones, pocos presagiaban que Bankia, fruto de la fusión de Caja Madrid, Bancaja, Caja Ávila, Caja Segovia, Caja Rioja, Caixa Laietana y Caja Insular […]
Dirigentes Digital
| 23 jul 2014
Cuando el sistema financiero español hacía aguas, con la precipitación de fusiones de la extintas cajas de ahorros y posteriores salidas a bolsa, y se cifraba el rescate bancario en 100.000 millones, pocos presagiaban que Bankia, fruto de la fusión de Caja Madrid, Bancaja, Caja Ávila, Caja Segovia, Caja Rioja, Caixa Laietana y Caja Insular de Canarias, iba a ser la única la única baza del Estado para reducir la factura del reflotamiento del sector.
Bankia se llevó los focos mediáticos por ser la entidad que más ayudas necesitó para su recapitalización. El Frob terminó por nacionalizar el 100% de su matriz, BFA, y las ayudas se dispararon a 22.400 millones, consumiendo un tercio de los recursos destinados a salvar al conjunto de entidades. Dos años después es la única de los bancos resultantes del proceso de reestructuración que han recibido inyecciones de capital público que puede terminar sin ser un coste para el contribuyente.
Desde que cogió las riendas de la compañía José Ignacio Goirigolzarri, Bankia ha emprendido un duro proceso de ajuste con una reducción del 39% de la red de oficinas y de un 28% de la plantilla, adelantándose a los plazos impuestos por Bruselas y al plan estratégico, que le permitió volver a beneficios en 2013 ganando más de 800 millones y consolidar los ratios solvencia y capital.
Recuperados 1.300 millones
El fruto del esfuerzo se vio compensado con inicio de la devolución de las ayudas. El Frob puso a la venta el 7,5% del capital que permitió obtener unos ingresos de 1.300 millones, con una plusvalía neta de 301 millones de euros. El importe registrado todavía no ha sido devuelto al Frob pero se aplicado íntegramente contra reservas en la matriz BFA. Las acciones se colocaron a 1,51 euros, un 12% por encima de la última inyección de capital que recibió de 19.000 millones.
Aunque la acción cotiza por debajo de los niveles de colación actualmente por las tensiones aparecidas en los mercados debido a la crisis del Banco Espirito Santo, los títulos este año han llegado a valer 1,6 euros. A Goirigolzarri se le ha metido entre ceja y ceja devolver la totalidad de las ayudas recibidas. En cada comparecencia pública resalta que el objetivo prioritario es que genere valor para hacerlo efectivo. Bankia se ha ganado el derecho a que potencialmente pueda devolver el capital inyectado. En menos de un año ha doblado su valor en bolsa. Los títulos del banco deberían alcanzar alrededor de los 3 euros para cubrir los 22.400 millones.
La buena evolución bursátil y de negocio se ha visto reflejadas también en la cuentas del Frob. El organismo elevó su valoración en libros a 9.492 millones desde los 8.793 millones a cierre de 2013. Con lo que una eventual supondría reducir en más de 700 millones el coste del rescate respecto a 2012.
Millones de pérdidas en otras entidades nacionalizadas
La reducción de la factura del rescate está fiada casi en su totalidad a Bankia. Sobre todo, teniendo en cuenta las últimas privatizaciones. Hasta el momento ha recuperado 1.760 millones al devolverse la totalidad de las ayudas a Banca Cívica por parte de Caixabank en 2013 y 712 millones por la venta de NCG, actualmente Abanca, al grupo venezolano Banesco. Aunque la operación se cerró en 1.000 millones a finales de año, pero el Frob estableció garantías para Banesco para cubrir posibles pérdidas. La entidad gallega requirió 9.000 millones en ayudas
En Catalunya Banc se ha perdido casi todas las ayudas de 12.000 millones. Como máximo se podrá recuperar 785 millones por parecidas razones. Aunque el Frob vendió la cartera de hipotecas tóxicas por 3.615 millones, tuvo que poner ayudas por 520 millones y afrontar provisiones de 2.200 millones. Parecido ha pasado con la adjudicación de la entidad a BBVA, vendida por 1.187 millones pero comprometiéndose garantías por más de 400 millones.
Además, de Bankia al Frob le queda por desprenderse de Banco Mare Nostrum y de participaciones en n Caja3 -absorbida por Ibercaja-, CEISS ?absorbida por Unicaja- y Liberbank adquiridas a través de deuda convertible. El Banco Mare Nostrum recibió ayudas por 1.615 millones y actualmente está valorado en 1.414 millones, con lo que su privatización aumentaría en 200 millones el rescate.
Respecto a las otras entidades, el Frob espera recuperar 1.135 millones por la amortización de las obligaciones convertibles, que no alcanzan ni la mitad de los 3.400 millones que necesitaron de capital público.
Ayudas totales de 96.170 millones
Las ayudas directas en forma de capital ascienden a 61.495 millones, de los cuales el Frob espera recuperar con seguridad solo 4.200 millones hasta el momento, sin contar con más ventas de participación en Bankia. Pero la factura del rescate puede crecer por las ayudas indirectas concedidas a través de garantías, avales y otros instrumentos.
En el aire están avales por 30.000 millones que todavía no están cancelados. Aunque el Frob no tiene previsto asumir pérdidas por ello. Además, hay más de 7.800 millones en forma de Esquema de Protección de Activos, que se utilizaron para las adjudicaciones de entidades como la CAM o Banco de Valencia, y que se verá si provocan más números rojos a largo plazo. También hay que contar con la inversión de 2.200 millones en la Sareb por la transferencia de activos inmobiliarios al banco malo.