Barcelona, con las buenas prácticas empresariales

La primera edición de estas jornadas, que nacen con el doble objetivo de ser un espacio de intercambio de ideas entre profesionales y académicos y difundir las buenas prácticas que contribuyen al crecimiento empresarial, fue inaugurada por el tercer teniente de alcalde de Barcelona, Antoni Vives la pasada semana, quien asistió en sustitución del alcalde Xavier Trias que excusó su ausencia por problemas de agenda. Vives abrió explicando que las ciudades deben tener un balance positivo tanto en resultados sociales como en los económicos, ya que "si solo nos orientamos al resultado financiero, pasan cosas como la burbuja inmobiliaria, y si solo nos orientamos a lo social, a la hora de la verdad no hay capacidad de generar absolutamente nada, tampoco beneficios sociales". Oriol Amat, presidente de Accid, tomó el relevo para finalizar la presentación del acto, asegurando que el crecimiento empresarial va absolutamente ligado al I+D y la internacionalización. "Ambas se retroalimentan en un círculo virtuoso", dijo antes de agradecer la asistencia de todos los ponentes.

El primer taller del día, dedicado a la colaboración público-privada, corrió a cargo de Constantí Serrallonga, gerente del Ajuntament de Barcelona, quien aseguró que el proyecto de la ciudad "tendrá éxito si somos capaces de crear una sinergia, una alianza de verdad entre el sector público y privado, tanto para que Barcelona mejore como para que las empresas tengan una plataforma de crecimiento". Eso sí, también recordó que la clave está en compartir no solo los éxitos sino también los riesgos, sin que la administración abdique de sus responsabilidades. La siguiente ponencia, de la mano de Mònica Reig, directora asociada del Programa Partners-IGDP (Esade), se centró en el papel del ciudadano "no solo como cliente, sino también productor y usuario" del sector público y abrió el debate sobre el cambio de rol al que se enfrenta la administración. Cerró la mesa Maria Petra Sáiz, presidenta del Col?legi de Secretaris Interventors i Tresorers de l’Administració Local de Catalunya, quien hizo un repaso sobre el marco legal que ampara esta nueva figura contractual que es la colaboración entre sector público y privado, admitiendo que estamos ante una "figura jurídica compleja" .

Las buenas prácticas en la gestión pública fue el tema del segundo taller que abrió Jordi Joly, gerente de Economía, Empresa y Ocupación del Ajuntament de Barcelona. Joly aseguró que uno de los actuales problemas de la administración es que políticos y funcionarios "no hablan el mismo idioma" y que la administración, en este sentido, debe aprender mucho del sector privado para ser competitiva, por ejemplo, adoptando una gestión directiva clara que, matizaba, debía de ser de la confianza del ayuntamiento. Josep Maria Canyelles, de la Universitat Oberta de Catalunya, fue el segundo ponente y habló de los compromisos éticos del sector público, recordó que la responsabilidad social no es solo gestión preventiva de riesgos sino que también ha de crear valor y, dio la razón a Joly al asegurar que "el sector público debería haber adoptado medidas de control de malas prácticas", igual que se hace en la gran mayoría de empresas.

El tercer y último taller se dedicó a la aceleración del crecimiento empresarial y fue sin duda el que aportó un matiz más práctico. En él participaron Susanna Tintoré, directora de Servicios de Barcelona Activa, que nos habló de los aceleradores como la "evolución natural" de las incubadoras de proyectos, y otra representante de la entidad que nos contó la experiencia de las 30 empresas innovadoras que participaron en el Programa aXelera en la que, al final, éstas valoraron sobre todo las propuestas de metodología y toma de decisiones. Luis Pardo, director de Sage España, intervino como último ponente con un discurso cargado de optimismo y ejemplos alrededor de los cuatro puntos clave para que, según apuntó, las empresas crezcan: internacionalización, innovación, financiación y, el factor diferencial, talento.

Oriol Amat (Accid) introdujo el acto de clausura añadiendo un factor más necesario para el crecimiento: "la ambición, si las empresas crecen es por ambición", apuntó. "Recuerdo lo que me contestó Jaume Alsina, fundador del Grupo Guissona, cuando le pregunté discretamente por el día de su jubilación: ‘Me retiraré el día que gane el doble que hoy’". Acto seguido, Alfredo Rocafort, vicepresidente de Accid se mostró muy satisfecho tanto de las ponencias como de la asistencia de público (entre 60 y 80 personas) y dio paso a Sònia Recasens, segunda teniente de alcalde de Barcelona, quien destacó la buena gestión económica del ayuntamiento que "se traspasa a la economía real" y expresó su contento por que la jornada se llevara a cabo justo en el Barcelona Growth Centre, un proyecto que nació de la administración como oficina de atención a las empresas donde se buscan soluciones para que sean más competitivas. "Queremos una ciudad TIC" , reconoció, "y ya le hemos pedido a ‘la Mobile’, uno de los ejes vertebradores de la ciudad, que se traslade a este edificio". Por último, explicó que la creación de aceleradores y startups ha conseguido que la ciudad lleve la innovación en su ADN y "se pueda mirar cara a cara con Silicon Valley" .