El presidente de
CaixaBank, Isidro Fainé, es optimista con la economía española. "Hay varios factores que apoyarán el crecimiento, como la reforma fiscal, la caída del precio del petróleo, la tendencia de los tipos bajos y la depreciación del euro", ha resaltado durante la
presentación de resultados de la entidad. El dirigente está convencido de que el PIB se situará por encima del 2%.
Ha destacado que actual entorno de intereses bajo, se mantendrá a largo plazo, "las empresas están comenzando a abrir mercados y a aprovechar las oportunidades, gracias a que la financiación está más barata", y ha añadido, "la economía está reflejando las reformas y se aprovechará además de las mejores condiciones financieras y de caída de precios". El banquero ha minimizado los riesgos para el futuro en dos claves. La primera, es que no habrá un escenario de deflación, ya que el IPC estará en negativo pero el descenso del coste energético, sin que tenga repercusiones negativas. Y la segunda, sobre las cuatro convocatorias electorales en España, "estamos acostumbrados a estos procesos y la economía irá tirando, son buenas por el aumento de gasto público, aunque se pierda un año en reformas".
Tampoco le preocupa que el desafía soberanista termine por afectando negativamente al banco y a la economía. "Somos un país de constante negociación. Seguir habiendo reuniones y diálogo y el escenario más razonable acabará siempre saliendo", y ha añadido, "nos mantenemos al margen de la política, . escuchamos a todos los partidos y somos respetuosos con todas las decisiones".
Respecto a la financiación de empresas y familia, de que el crédito sirva de motor económico, el consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, ha destacado que a final de año ha mejorado considerablemente las concesiones de préstamos. "Durante el cuarto trimestre, el crédito sano sin tener en cuenta el sector promotor aumentó un 2,7%", ha señalado, "hay un cambio de tendencia gracias a la mejora económica y a un esfuerzo en concesión de crédito". La concesión de nuevo crédito se aceleró al 54% en los últimos tres meses. Aunque el balance anual de CaixaBank no es positivo, al descender el crédito un 4,8% con un volumen de 10.046 millones, "trimestre a trimestre está aumentando y en 2015, tendremos una cartera estable".
El número dos de CaixaBank se atreve a afirmar que el saldo será positivo gracias a la producción de nuevos préstamos. En 2014, creció un 26 %, sobre todo en hipotecas y en menor medida del consumo. Fainé ha destacado que CaixaBank se encuentra en una inmejorable posición de liquidez para dar crédito. "Cuando me pregunta si la banca no da crédito, yo digo que por qué no lo piden". Gortázar ha remarcado que durante los años de crisis la entidad ha mantenido el mismo control de riesgo, porque el objetivo es prestar dinero. "Nunca me creen. Pero el principal objetivo de un banco es conceder préstamos. Es nuestro negocio principal", a continuación ha asegurado "que lo más importante cuando se concede un crédito es asegurarse de que se va a devolver".