Aunque en España aún queda mucho camino por recorrer en materia de pagos digitales, el impulso hacia un futuro sin efectivo ya cuenta con proyectos piloto. Si el pasado mes de octubre Banco Santander puso en marcha una iniciativa en el municipio cántabro de Suances con la que perseguía extender métodos alternativos al metálico entre […]
Dirigentes Digital
| 09 abr 2018
Aunque en España aún queda mucho camino por recorrer en materia de pagos digitales, el impulso hacia un futuro sin efectivo ya cuenta con proyectos piloto. Si el pasado mes de octubre Banco Santander puso en marcha una iniciativa en el municipio cántabro de Suances con la que perseguía extender métodos alternativos al metálico entre la población, ahora ha llegado el turno de CaixaBank. La entidad financiera ha elegido Morella (Castellón) para lanzar un proyecto de promoción y difusión del uso de dispositivos móviles, tarjetas y otras maneras con las que pagar en los establecimientos. ‘Morella cashless city’ es el nombre que recibe esta propuesta, inaugurada formalmente este lunes, y cuyo objetivo persigue fomentar las transacciones sin efectivo, especialmente entre el comercio de proximidad. “La innovación digital tiene mucho que aportar al pequeño comercio y a las pymes”, ha señalado el director territorial de CaixaBank en la comunidad valenciana, Xicu Costa. Así, durante los próximos seis meses, cualquier usuario podrá acceder a esta experiencia, válida para todos los medios de pago disponibles e independientemente del sector donde realice la compra. Tarjetas, dispositivos wearables como las pulseras contactless o los relojes Garmin son algunos de ellos. De manera adicional, CaixaBank ha diseñado una tarjeta Visa con la imagen del castillo de Morella disponible para todos la población. Por cada adquisición que se realice a través de esta iniciativa, el banco destinará 0,5 céntimos a una iniciativa social local. Concretamente, un vehículo adaptado para personas con movilidad reducida. La idea pasa por acercar este tipo de prácticas a niveles similares con los de la Unión Europea. Según datos del Banco de España, en el momento actual, los índices de pago digital en España (24,2%) aún se encuentran lejos de las experiencias ‘cashless’ más avanzadas de Europa. Un aspecto en el que destaca Suecia, donde dos de cada tres consumidores reconocen no utilizar nunca billetes y monedas y más del 80% de las compras se realizan vía tarjeta. Precisamente este país fue noticia hace unas semanas por la velocidad a la que avanzan en materia monetaria. Una gran cantidad de bancos suecos han dejado de ofrecer dinero en efectivo en las sucursales ante la falta de demanda. En su lugar, han abogado por instalar cajeros automáticos en los puntos de mayor incidencia como centros comerciales y de transporte para aquellos que prefieran el metálico. Transparencia, comodidad y agilidad son las ventajas que los expertos ven en estos nuevos métodos de pago. Por el momento, las operaciones con tarjeta junto al pago por transferencia, parecen ser las únicas que convencen casi tanto como el metálico a los españoles.