Parecía que el calvario de tribunales de Demetrio Carceller había terminado cuando, a comienzo de año, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional daba por archivado el caso en el que estaba acusado de fraude fiscal y blanqueo de dinero. Pero la Fiscalía Antocorrupción recurrió la sentencia y el Tribunal Supremo le ha […]
Dirigentes Digital
| 17 jul 2014
Parecía que el calvario de tribunales de Demetrio Carceller había terminado cuando, a comienzo de año, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional daba por archivado el caso en el que estaba acusado de fraude fiscal y blanqueo de dinero. Pero la Fiscalía Antocorrupción recurrió la sentencia y el Tribunal Supremo le ha dado la razón. Carceller no se salvará de ser juzgado.
El presidente de la cervecera Damm se enfrenta a 14 años de prisión por haber evadido más de 66 millones de euros en impuestos, según las investigaciones de Hacienda facilitadas al juez Ruz, instructor del caso. Demetrio Carceller está acusado de estar implicado en la trama de blanqueo de dinero que organizó su padre desde los años 90 para ocultar inversiones inmobiliarias en Arizona mediante la gestión de estructuras necesarias que liberaran las rentas generadas de pagar impuestos.
En la instrucción del caso, que está listo para sentencia, el juez Ruz considera demostrada que padre e hijo diseñaron una trama para defraudar al fisco en el IRPF, Impuesto sobre Patrimonio y Sucesiones. A Carceller Coll se le acusa de simular vivir desde principios de los noventa en Portugal y el Reino Unido y de crear una red de empresas radicadas en paraísos fiscales que reinvertían las ganancias en sociedades de la familia por las cuales ejercicio tras ejercicio quedaban libres de impuestos.
La Fiscalía Anticorrupción de 48 años y seis meses para Carceller padre. Ambos se encuentran en libertad provisional después de depositar una fianza en su momentos de 746 millones.
En el caso, también están imputados José Luis Serrano Flórez, el hombre de confianza de los Carceller, y el abogado Gabriel Ignacio Petrus Labayen. La fiscalía pide entre 19 y 42 años de cárcel respectivamente.
Según las investigaciones de la Agencia Tributaria, pesquisas de la AEAT, los Carceller defraudaron más de 66 millones de euros, de los que 42,3 millones corresponderían a cuotas no abonadas por IRPF entre los años 2001 y 2009, y otros 24 millones serían los impagados hasta el 2007 en concepto de impuesto sobre el patrimonio. El fraude fiscal está tipificado como delito si supera los 120.000 euros.