Cinco años después de que se empezara a instruir el caso, tres jueces y más de 300 imputados, los delitos investigados comienzan a prescribir. Durante todo este tiempo se daba por hecho que pasaría, debido a la magnitud de la causa y a la lentitud procesal. Tanto la Guardia Civil como judicatura habían advertido a […]
Dirigentes Digital
| 17 mar 2016
Cinco años después de que se empezara a instruir el caso, tres jueces y más de 300 imputados, los delitos investigados comienzan a prescribir. Durante todo este tiempo se daba por hecho que pasaría, debido a la magnitud de la causa y a la lentitud procesal. Tanto la Guardia Civil como judicatura habían advertido a la juez Alaya de esta circunstancia y habían recomendado aceptar ayuda de jueces auxiliares y trocear el caso.
Hoy se han producido las primeras prescripciones. La juez María Núñez Bolaños ha archivado el caso para doce imputados por malversación y prevaricación a empresarios de la Sierra Norte.
Por primera vez la jueza Mercedes Alaya ha hablado públicamente del caso, después de que abandonara la causa. La magistrada en una ponencia en la Universidad de Sevilla ha explicado que la culpa de las prescripciones no son de "los jueces, ni la Guardia Civil,sino estas tramas delictuales, extremadamente complicadas que generan un esfuerzo personal y material que sobrepasa nuestras posibilidades". Ha culpado de la tolerancia de los partidos políticos.