A pesar de la oposición de Washington a la iniciativa, algunos de sus aliados como Australia, Reino Unido, Alemania, Italia, Filipinas y Corea del Sur llegaron a un acuerdo para unirse al Banco Asiático de Inversión en Infraestructura, en un reconocimiento de la creciente influencia económica de China. "Las necesidades financieras de Asia para infraestructuras […]
Dirigentes Digital
| 16 ene 2016
A pesar de la oposición de Washington a la iniciativa, algunos de sus aliados como Australia, Reino Unido, Alemania, Italia, Filipinas y Corea del Sur llegaron a un acuerdo para unirse al Banco Asiático de Inversión en Infraestructura, en un reconocimiento de la creciente influencia económica de China.
"Las necesidades financieras de Asia para infraestructuras básicas son de verdad enormes", explicó Xi en el discurso de inauguración, en el que destacó que el banco tiene como objetivo invertir en proyectos de "alta calidad y bajo coste".
Según informa Reuters, se espera que el banco preste entre 10.000 millones a 15.000 millones de dólares al año durante los primeros cinco o seis años, y que inicie sus operaciones en el segundo trimestre de 2016.
Aun así, por ahora no se anunciará ningún proyecto específico de infraestructuras, dijo el presidente del banco, Jin Liqun, a Reuters.
El ministro de Finanzas de Luxemburgo, Pierre Gramegna, dijo que el establecimiento del banco es "una prueba más del nuevo equilibrio de la economía mundial".
Para China, el actual Banco Mundial y el FMI establecen un orden financiero mundial dominado por Estados Unidos que no representa a los países en desarrollo. Por eso, el gigante asiático busca crear un banco exitoso aparte de estos dos organismos, lo cual supondría un importante triunfo diplomático para el país.