China pone freno a la burbuja inmobiliaria

Los precios promedio de las casas nuevas en las 70 ciudades principales de China se han incrementado un 11,2% de media en septiembre en comparación con el mismo mes de 2015. En comparación con agosto supone una subida del 9,2% según los últimos datos del Buró Nacional de Estadísticas. Por poner algunos ejemplos, la ciudad de Hefei, capital de la provincia céntrica de Anhui, registró una subida interanual del 46,8%, un 40,3% más que en agosto. O la costera ciudad de Xiamen registró unos precios un 46,5% más elevados, un 43,8% más que en el mes anterior. Para frenar la creciente burbuja inmobiliaria que acecha al gigante asiático, el Gobierno chino ha iniciado una serie de restricciones a la compra de vivienda que entraron en vigor este mes de octubre, por lo que muchos compradores decidieron comprar antes de que acabase septiembre. Por ello, la agencia Xinhua informa de que los últimos datos del Buró Nacioanl de Estadísticas, correspondientes a las primeras semanas de octubre, reflejan un frenazo en cuanto al alza de los precios y que atribuyen precisamente a esta entrada en vigor de las restricciones a la concesión de hipotecas y a la adquisición de segundas y terceras viviendas. El sector inmobiliario representa cerca del 15% del PIB chino, y su continua expansión ha contribuido decisivamente al último dato de crecimiento económico de China, que consiguió mantenerse estable en el 6,7% en el tercer trimestre. Así, la construcción y las ventas en inmobiliario consiguieron compensar la debilidad de las exportaciones y de la inversión privada; ahora, las nuevas restricciones ponen en tela de juicio al principal motor de China en la actualidad al tiempo que dejan en el aire el avance del que, según los expertos, podría ser el peor estallido de una burbuja inmobiliaria. Según la página web de los republicanos franceses, la participación ha sido masiva, con unos 2,9 millones de votos, aproximadamente.