Xi Jinping ha manifestado que "cada país debe unirse y frenar el abuso de la tecnología de la información, oponerse a la vigilancia de la red y la piratería informática y luchar contra una carrera armamentista en el ciberespacio". En resumidas cuentas, el presidente de China ha puesto a su país al frente del debate […]
Dirigentes Digital
| 16 dic 2015
Xi Jinping ha manifestado que "cada país debe unirse y frenar el abuso de la tecnología de la información, oponerse a la vigilancia de la red y la piratería informática y luchar contra una carrera armamentista en el ciberespacio". En resumidas cuentas, el presidente de China ha puesto a su país al frente del debate sobre el control y la soberanía de la red global.
No es la primera vez desde que Xi Jinping ostenta su cargo que inicia una campaña de centralización de la gobernanza de Internet. Desde que en 2013 ha realizado diversos esfuerzos para controlar, e incluso censurar, el flujo de la información en línea.
De hecho, el sistema de censura en línea más sofisticado del mundo, el "Gran Muro de Fuego", está operado por China. Este se ocupa de bloquear y atacar a los servicios de la red que desde Pekín consideren indeseables o inadecuados.
La directora de investigación para Asia Oriental de Amnistía Internacional, Roseann Rife, ha manifestado mediante un comunicado de prensa su opinión respecto a las intenciones del presidente chino: "Las compañías tecnológicas, como Apple, Google, Facebook, LinkedIn y Microsoft, deben estar preparadas para decir no al régimen represivo de Internet de China y poner a las personas y los principios antes que las ganancias".
Otros organismos han decidido ser menos dialogantes y buscar otra vía de mostrar su rechazo ante las declaraciones de Xi Jinping. Incluyendo el grupo que promueve la libertad de prensa Reporteros sin Fronteras y el organismo de vigilancia de la censura china GreatFire.org, algunas entidades llamaron a un boicot de la Conferencia Mundial de Internet de China.